Hace un par de años, comenté el famoso “Coca no, agua”, del futbolista Cristiano Ronaldo cuando en la entrevista previa a un partido de la Liga de Campeones retiró con fastidio unas botellas que contenían el negro líquido. Ese gesto que dio la vuelta al mundo se sumó a la cruzada que realizan organizaciones de la sociedad civil para hacer conciencia del daño a la salud que provocan las bebidas gasificadas y altamente azucaradas y exigir que los responsables se hagan cargo de ello.
En México, la batalla de un asunto que debería estar regulado desde hace décadas por la Secretaría de Salud se ha librado en diferentes frentes hasta conseguir impuestos a las bebidas azucaradas y el etiquetado frontal a productos que entró en vigor apenas desde octubre del 2020. ¿Por qué?
Buena parte de la respuesta está en la manera en que empresas multinacionales inciden en políticas públicas. Las fichas de la Coca-Cola, reportaje de PopLabMx realizado por un grupo liderado por Kennia Velázquez y Elizabeth Rosales, brinda una mirada única hacia tácticas que han permitido retrasar por décadas medidas urgentes, pues cuestan la vida de más de 100.000 mexicanos cada año por la diabetes. Con base en una extensa investigación que reunió incluso correos internos de la transnacional, este trabajo acaba de obtener el premio Fetisov al Mejor Reportaje de Investigación. Financiado por el multimillonario ruso Gleb Fetisov, se le considera el galardón internacional con el mayor estímulo económico.
Publicado en marzo del año pasado, presenta los nombres y apellidos de personajes imbricados en los conflictos de interés de la función pública y la esfera privada, y deja al descubierto los métodos empleados en específico por Coca-Cola para ello, como “fichar políticos para que operen en su favor, pagar estudios científicos o patrocinar campañas de gobierno.”
Sí, acertó, la primera corcholata que aparece es el exgobernador de Guanajuato y expresidente de México, Vicente Fox, que hoy además concentra una buena cantidad de los permisos para vender derivados de la mariguana (otra droga con mucha menor carga letal). Y no se sorprenda si encuentra personajes como Ernesto Zedillo, Luis Téllez, Roberto Campa o Mercedes Juan.
El contrapunto de las corruptelas y constante injerencia en políticas públicas, en particular en el sexenio de Enrique Peña Nieto, se encuentran estadísticas devastadoras: las bebidas azucaradas son responsables de más de 24 mil muertes cada año, según reportó el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) en 2020; en México entre 2000 y 2018 la obesidad aumentó en un 42.2%, mientras la incidencia de la diabetes creció más de un 39%; el consumo promedio anual de refrescos en nuestro país ronda los 163 litros por persona al año, para lo cual cada hogar dedica el 9% de su dinero; casi uno de cada cuatro bebés entre 6 y 23 meses bebe un vaso de refresco al día…
Para leer con detenimiento y cuestionar no sólo nuestra forma de alimentarnos o votar en las elecciones. También para exigir que la justicia tome cartas en el asunto. Felicidades a los ganadores.
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