Celaya, Guanajuato – El Obispado condenó la agresión de policías en contra un reportero de la ciudad, refiriendo que el ejercicio de sus funciones no da el derecho de agredir a los civiles, ni siquiera cuando el argumento sea para poner orden.
explicó que las agresiones en general son un hecho que la iglesia siempre condenará, en el caso de la presunta agresión al reportero de Celaya Ángel Galindo, refirió que los elementos deberán encontrar las formas de hacer su trabajo sin vulnerar los derechos de la ciudadanía, sobre todo en situaciones donde cada una de las partes está en cumplimiento de su labor.
Si se da en un contexto donde este joven estaba fuera de su ámbito de trabajo, en sus actividades laborales, con amigos o con la familia e irrumpen, es más condenable aún”.
Lo anterior, luego de que este viernes el reportero, presuntamente fue privado de su libertad y torturado por parte de policías que irrumpieron cuando estaba cerca del Parque Bicentenario, esperando indicaciones de su trabajo.
El vicario señaló que el uso de la violencia es grave en las diferentes situaciones y no es justificable tampoco en entornos donde a veces los medios y los policías se confrontan para hacer su labor.
“No sé en qué contexto se haya dado. Si fue en un contexto de cubrir una nota donde estos señores estaban haciendo su trabajo, ahí hay que entender que los dos estaban haciendo su trabajo. Los policías el suyo y el reportero haciendo el suyo. Ciertamente a veces los policías pueden tener la preocupación de que no se contamine la escena, pero hay otras maneras de hacerlo para no llegar hasta esas situaciones”, señaló.
Señaló que es necesario mayor apertura y comprensión por parte del sector de seguridad al momento de desempeñar su función y en caso de haber alguna molestia por el trabajo de reporteros, pensar en que algo se está haciendo mal.
“Hay que entender que no todos están de acuerdo con nosotros. Así como los policías piden de alguna manera ser entendidos y comprendidos en su trabajo como guardianes del orden, así también los periodistas tienen derecho a ser entendidos y comprendidos en lo suyo”.
El vicario exhortó a dar una postura sobre la posibilidad de que el hecho se relacione con la falta de los filtros de control y confianza en las corporaciones de seguridad.
“Debe de haber algún mecanismo, no los conozco como tal, pero cualquiera puede salir de sus casillas”, refirió.
Respecto al cambio de titular que se dio en la Dirección de Policía Municipal, de Enrique Chabolla Mosqueda a Miguel Reyes Ortega, el Vicario consideró que mientras sea para bien puede representar favorable para el mejor desempeño de la corporación, sobre todo, deberá proyectarse a la ciudadanía.
“Yo creo que es un reto para quien recibe el cargo, para corregir y mejorar aquello que ya se estaba haciendo, para mí, todos los cambios son buenos. Quienes trabajan en estas dependencias deberán responder a las expectativas (…) Esperemos que tenga también un reflejo en el sentir común, porque si no tiene un reflejo, acá entonces no se alcanzan a valorar”, expresó.