Faltaban pocos meses para que la oportunidad de un millonario contrato llegara a blindar una carrera promisoria desde su incursión a la Major League Baseball (MLB) con una de las franquicias más exigentes del mundo.
Sin embargo, más allá de sus imponentes números sobre el montículo, la vida deportiva de Julio César Urías Acosta se irá totalmente a la borda por reincidir en una aberrante conducta personal.
Tras hacerlo en 2019 y ser suspendido por 21 juegos, “El Culichi” volvió a ser arrestado por violencia doméstica en Los Ángeles.
Según los reportes de Jeff Passan, quien trabaja para la importante cadena de ESPN Deportes, fue detenido la noche del pasado domingo 3 de septiembre, y aunque salió libre las primeras horas del lunes, pagó una fianza de 50 mil dólares.
Aquello puede acabar de forma definitiva la carrera del mexicano en las Grandes Ligas, pues las Grandes Ligas no toleran este tipo de conductas y, fiel a los valores de la organización, los Dodgers de Los Ángeles ya hablaron al respecto.
“Tenemos conocimiento de un incidente que involucra a Julio Urías. Mientras tratamos de conocer todos los hechos, él no viajará con el equipo. La organización no tiene más comentarios por el momento”.
El texto (entre líneas) lo dice todo: no eres más un integrante de nuestra franquicia.
Y es que la MLB es demasiado rigurosa en este tipo de aspectos al crear su política de violencia doméstica en 2015, en el cual se hace una investigación que en caso de encontrar culpable a un jugador, se le asigna un castigo por actos de violencia doméstica, abuso sexual o infantil.
Mientras la investigación se da, el jugador es puesto en una lista restringida que no le permite pararse en ningún diamante por siete o más días.
Con más de 15 peloteros sancionados, el de más ‘escandaloso’ fue el caso de Trevor Bauer, quien mientras jugaba para los Dodgers fue denunciado por denuncias de agresión sexual y recibió una suspensión de 324 juegos.
Aunque después quedó reducida a 194, prácticamente podríamos decir que está vetado del mejor beisbol del mundo al grado de estar lanzando con los Yokohama DeNA BayStars de la Liga Japonesa.
El adiós de su carrera
Es inexplicable que esto haya vuelto a suceder, pues aún y cuando se le otorgó una segunda oportunidad con los Dodgers, es lamentable que Urías no haya recapacitado por completo.
Algo similar sucedió en 2018 con Roberto Osuna, quien en el pináculo de su carrera como cerrador de los Astros de Houston, recibió una sanción de 75 juegos por la misma problemática.
Sin saber la sanción que recibirá, su calidad en el montículo sale sobrando.
Hoy, en un deporte que debe ser motivante para los aficionados, su nombre puede quedar en el olvido.
Hoy, para su servidor, la carrera de Julio Urías en Grandes Ligas, ha llegado a su fin.
Una vergüenza para el beisbol mexicano.
Así de fácil.
-El Dugout Del Gabo.