En su sermón mañanero, el presidente López Obrador hizo referencia a un “personaje argentino” que habla mal del Papa Francisco. Comentó que tenía una “amiga católica” a la que le llamaba la atención Javier Milei. Para demostrar la calaña del argentino, le envió un video donde el candidato que encabeza las encuestas en su país, se expresaba muy mal del Santo Padre.
Qué hombre éste”, comentó la amiga a AMLO sorprendida por la arremetida de Milei contra su compatriota el Papa. El presidente dijo que “el nivel de intolerancia, de falta de respeto de un personaje así…no conozco a ningún político que haya dicho lo de Milei.
Luego el Presidente dice que el 99 % de los mexicanos no están enterados del insulto y que es importante no dejarnos engañar, “que no nos manipulen, que tengamos información, porque esto que les voy a mostrar, estoy seguro que no lo saben (sic) la mayoría de la gente en México, porque ni modo que el Reforma no va a sacar esto o la prensa conservadora…”.
Enseguida difunde el video donde Milei dice que, “No, no, el Papa, sí lo voy a decir de frente, es el representante del maligno en la Tierra, ocupando el trono de la casa de Dios, vos sabes que el Papa impulsa el comunismo, con todos los desastres que causó y eso va en contra de las propias escrituras…”.
Milei sorprende al mundo con su posición radical ubicada en la ultraderecha, del lado de Trump, Bolsonaro y Bukele. Pero lo extraordinario es que tiene de su lado a millones de argentinos desencantados con el fracaso del populismo peronista.
El último marcador de la inflación en Argentina fue del 12 %, (mensual). El dinero se hace agua, la pobreza aumenta y los ciudadanos pierden toda esperanza de salir adelante con los mismos gobernantes. Por eso creen que el furibundo antisocialista y anticomunista, traerá soluciones con un individualismo incendiario. Fuera las empresas del estado, fuera el banco central, fuera la educación pública, fuera los subsidios y que venga el dólar como moneda, para que no haya más devaluaciones.
Javier Milei encontró un electorado hastiado de los últimos gobiernos con una receta que le llega a la clase media o ex clase media que desde hace tiempo perdió la esperanza. Es bárbaro, irrespetuoso y vulgar al parlotear en contra de Francisco, pero tiene un argumento cuando se lanza en contra de Nicolás Maduro, Raúl Castro, Daniel Ortega, dictadores enemigos de la libertad. Se equivoca cuando critica a Ignacio Lula de Brasil. Sus ideas de ortodoxia económica neoliberal no pueden aplicarse de un día para otro sin tener un levantamiento social. Así que, como buen populista de derecha, dice mentiras sobre lo que verdaderamente se puede lograr.
Curioso que López Obrador habla de intolerancia y acto seguido arremete contra el periódico Reforma y la “prensa conservadora”. Si pensamos en su intolerancia hacia los demás poderes o la ausencia de diálogo durante 5 años con la oposición, vemos una gran contradicción; qué decir de la privatización del festejo del 15 de septiembre. Peor aún: intolerancia son los agravios a la candidata de la oposición sin ningún motivo o la marcha de soldados rusos y nicaragüenses en el desfile nacional, una ofensa por tener de compañeros de parada a representantes de dictaduras, esas sí, absolutamente intolerantes. Milei va a descuadrar muchas cosas en Latinoamérica, pero ese es tema de otra perspectiva.
Gsz