Ciudad de México.- Desde hace dos meses, albergues de todo el País alertaron a las autoridades por el incremento de migrantes y ahora, ante la saturación, decenas de extranjeros se vieron obligados a dormir en el exterior de diversos refugios.
La Casa del Migrante Arcángel Rafael, ubicada en Iztapalapa, en la Ciudad de México, por ejemplo, denunció que además de la falta de espacio y víveres, los migrantes se enfrentan a la discriminación y el maltrato, pues en esa Alcaldía les quitan sus tiendas de acampar y quedan desprotegidos ante las lluvias.
Una de ellos es Raquel Cruz Blair, una extranjera nicaragüense que pidió ayuda en redes sociales, al afirmar que ha pasado días durmiendo en las calles de la Capital.
Amigos, alguien que sepa de renta barata aquí en la Ciudad de México, somos cuatro personas que estamos esperando nuestra cita, llevamos tres días durmiendo en la calles porque el albergue está saturado, externó.
Ante esto, el refugio exigió al Instituto Nacional de Migración (INM) agilizar los trámites para que se les facilite el tránsito en condiciones más seguras; no obstante, la situación no ha cambiado.
En Matamoros, Tamaulipas, hacen filas o acampan alrededor de albergues en espera de que se abran lugares y puedan ingresar para esperar en un “lugar seguro” una cita para cruzar de forma legal a Estados Unidos.
Apenas a mediados de agosto pasado, el refugio “Dr. Alfredo Pumarejo” abrió sus puertas a los extranjeros que estuvieran en Matamoros.
En su primer día, recibió a 600 personas; sin embargo, ahora están albergados más de mil y debido a la saturación, sólo les permiten ingresar por las noches, por lo que otros pernoctan afuera y se da preferencia a mujeres y niños.
El sitio que recibe recursos del Gobierno estatal y es coordinado por la Casa del Migrante “San Diego”, fue insuficiente y ahora espera una ampliación para recibir a al menos otros 600 más.
El Obispo de la Diócesis de Piedras Negras, Coahuila, Alonso Garza Treviño, informó a medios de comunicación locales que en esa ciudad fronteriza prácticamente están llegando mil migrantes por día, lo que calificó como sorprendente, pues, dijo, supera la capacidad de las casas de asistencia de la región.
Asociaciones civiles y religiosas de Ciudad Juárez y Tijuana, Chihuahua; Ciudad de México; Oaxaca y Querétaro, también piden ayuda ante esta “crisis migratoria” que, afirman, ha causado complicaciones para dotar de víveres, servicios y refugio para los extranjeros, en su mayoría sudamericanos que cruzan por sus territorios.
Gsz