Salamanca.- Entre lágrimas y con la voz quebrada, Teresa de Jesús Juárez Aguirre exige justicia por el cruel asesinato de su madre, Laura Elena Aguirre Martínez, ocurrido el 30 de octubre en un camino rural hacia Santo Domingo.
Que se haga justicia, no puede quedar impune”, imploró Teresa de Jesús, expresando temor por su familia y frustración por la falta de protección de las autoridades. La inacción policial ante el acusado, quien permanece en su hogar, aumenta su desesperación y temor por posibles represalias.
Haciendo un llamado directo al gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, Teresa de Jesús urge una investigación diligente y sanciones para el perpetrador del crimen, que aún no se ha clasificado como feminicidio.
“Fue feminicidio y nada justifica el daño que nos hizo”, enfatizó, aludiendo al impacto devastador del homicidio en su familia, que ahora debe cuidar a dos menores.
A pesar de la ayuda material y psicológica brindada por el municipio, las autoridades aún no han detenido al hombre identificado como el agresor.
Según testimonios, Laura Elena llegó a nombrar a su atacante antes de ser mortalmente herida, donde otras dos personas también resultaron lesionadas.
Existe una orden de aprehensión contra el acusado, pero la falta de una orden de cateo y el riesgo de que pueda huir a Estados Unidos, donde tiene permiso para trabajar, suman a la incertidumbre y al miedo de la familia.
Laura Elena Aguirre Martínez, de 43 años, es recordada como una madre amorosa y dedicada, que se convirtió en el sustento de sus tres hijas tras el fallecimiento de su esposo.
Trabajaba en una empresa de pisos y azulejos, siendo descrita como una persona sin conflictos y un pilar familiar.
HEP