Tanta temporada perdedora que los hundió en el sótano de la Zona Sur, evidenció la falta de rumbo en los Bravos de León sin la certeza de poder llamarle ‘proyecto’ a lo que se sostuvo durante seis temporadas anteriores en la Liga Mexicana de Beisbol.
Por eso, lo que se está haciendo en esta temporada baja del 2023, es de resaltar, aplaudir y evidenciar de cara a un 2024 donde las cosas se ansían con cambiar.
El homenaje al pasado, el fortalecimiento del presente y la visión hacia el futuro, son temas que comienzan a tratarse dentro de la organización con el retiro del icónico número ‘25’ de Paquín Estrada, la llegada de seis beisbolistas (aunque faltará verlos en acción) y la integración de distintas academias de Guanajuato.
Esto último se reflejó de grata manera el pasado fin de semana dentro del Domingo Santana, donde se disputó el Torneo Sub 23 entre la Academia Bravos, Academia CODE Guanajuato, Uriangato y Purísima del Rincón.
La ilusión de jóvenes prospectos es algo que no tiene precio, pues el haber jugado en un estadio profesional frente a decenas de asistentes y con la pupila de los ‘scouts’ de los Bravos de León puesta sobre sus figuras, es un incentivo para seguir con su proceso formativo.
Julián Silva (INF), Antuan Franco (INF), Julio Zamora (INF), César Macías (INF) y Bryan Lara (P), son algunos de los tantos nombres que figuraron en este cuadrangular que se llevó Guanajuato ante Bravos gracias a una favorable pizarra de 4-14.
Algunos como Antuan y Lara, quienes son integrantes de la capital, captan el interés y seguimiento de los mánagers Alfredo Peralta y Ramón Cairoz que, en conjunto, trabajan en busca de talento local para desarrollar y debutar en la LMB.
Más allá de los resultados, el buen ambiente producto del enorme compañerismo, brotó en ambas novenas que vivieron una experiencia inolvidable en lo que fue el segundo fin de semana del presente noviembre.
Aunque se notó poco interés en la afición leonesa porque no asistió en su mayoría al estadio, siempre es de aplaudir que se hagan este tipo de dinámicas; más en un circuito que necesita la producción de talento nacional para no seguir llenando el roster de peloteros extranjeros.
Van bien los Bravos, pero resta lo más importante: los resultados en el primer equipo.
Por lo pronto, ya se ve que existe un verdadero proyecto desde las bases.
Así sí, Bravos, así sí…
PD: Ya se viene algo novedoso en el dugout leonés para el 2024. Esperen la noticia…
-El Dugout del Gabo.