La llamada “Guerra contra el Narcotráfico” ha provocado que miles de niños, niñas y adolescentes en situación de pobreza y marginación hayan sido reclutados por la delincuencia organizada. Empiezan como “halcones” vigilando alguna presencia de autoridades, haciendo mandados, posteriormente se involucran en tráfico de estupefacientes y pueden llegar a convertirse en sicarios. Estas víctimas quedan enganchadas con promesas de una vida mejor con goce de dinero y poder, o bien son sometidos con amenazas y violencia física. Ante estas circunstancias ¿Qué pasaría si alguno de estos chicos o chicas es detenido por autoridades? ¿Debe la justicia mexicana juzgarlos sin tomar en cuenta la situación de vulnerabilidad y de obligatoriedad a la que fueron expuestos?

Ante esta reflexión, llamó mi atención un material de la videoteca de TED en el que el publicista Francisco Samper propone que las ideas son más poderosas que las balas. En Colombia, cerca de 2 millones y medio de menores de edad habían sido reclutados por las fuerzas de la guerrilla, alejados de sus hogares y padecido casi todas las modalidades de violencia incluida la sexual. La voluntad y esmero de los tres últimos presidentes de este país, lograron con las extraordinarias fuerzas armadas de Colombia reducir la guerrilla hasta no dejarle más opción que la de negociar la paz  y ponerle fin a este conflicto.

El propio Ejército, el Gobierno nacional y la misma guerrilla reconocen que hubo otra arma muy importante que logró la desmovilización total de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia). Esta fue la de las campañas que se gestaron en la agencia de este publicista de Bogotá constituyendo una gran estrategia militar. ¿Podría la publicidad ayudar a desmovilizar guerrilleros? Pues en efecto así fue.

Para lograrlo empezaron por entender cuáles eran sus sentimientos, sus pensamientos, sus creencias, sus miedos. La mayoría de los guerrilleros había sido reclutada cuando eran adolescentes, casi niños. Gran parte eran hijos de campesinos sin acceso a la educación y habían sido confinados a la impenetrable selva. ¿Cómo hacerlos salir de ahí? Se decidió empezar a llegarles al corazón en lugar de a la cabeza y tratarlos como los seres humanos que son y no como enemigos sin rostro. Sin TV, radio ni prensa y menos internet ¿Cómo poder llegarles?

La primera campaña salió para la Navidad del 2010 aprovechando estas fechas que era importante para todos pasarlo en familia. Con estrategia militar y dos helicópteros se adentraron en la selva y pusieron miles de metros de cable con luces rodeando nueve árboles en la zona de mayor concentración, y cuando la guerrilla estaba haciendo desplazamientos, de repente se les aparecían árboles de 30 metros de alto que develaban el mensaje: “Si la Navidad pudo llegar a la selva, usted puede llegar hasta su casa”. Este mensaje logró que 300 guerrilleros regresaran a su casa y abandonaran la selva.  Así se mantuvieron distintas estrategias que durante diez años lograron cerca de 18,000 desmovilizados. Poco después se firmó el acuerdo de paz que ha polarizado al país ya que hay quienes piensan que se cedió mucho a la guerrilla y no se castigó a los guerrilleros.

Volviendo a México, ¿Sería posible que los chicos y chicas reclutados por la delincuencia organizada pudieran regresar a casa para Navidad con alguna estrategia? ¿Se lograría un acuerdo de paz para ellos y ellas?

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *