Qué va de Peso Pluma a José José; que va de Los Panchos a Grupo Tumbao. Va una gran diferencia expresiva verbal, vocal, cultural y social.
Las generaciones de individuos y la forma de pensar van cambiando. Un ejemplo claro lo constituyen The Beatles y Elvis Presley, quienes por medio de su música hicieron temblar a la sociedad de donde surgieron para, después, ser considerados como los grandes exponentes de su tiempo.
Desde mi punto de vista se están perdiendo valores personales, individuales y familiares. Nos tenemos que poner a pensar qué es lo que estamos dejando a las futuras generaciones.
La cultura se transmite de generación en generación: las hijas y los hijos la aprendemos de nuestras madres, nuestros padres, amigos y de la comunidad. La cultura cambia y las diversas influencias externas contribuyen a ese cambio. Cada uno de nosotros vamos cambiando de ideas, conocimientos, intereses, y vamos tomando decisiones que van influyendo en la cultura individual. Por ejemplo, Durkheim plantea el hecho de que a lo largo de la historia se ha operado un cambio radical en la sociedad.
La adolescencia es cuando te formas, donde vas sacando el carácter y vas viendo qué te gusta, qué tipo de persona quieres ser en tu vida y tu formación a largo plazo. En esa etapa afirmamos nuestra identidad personal y de grupo generacional; es decir, de gente de nuestra edad. Para la mayoría de las y los adolescentes la música es uno de los espacios de afirmación generacional. Nos pasamos horas escuchando música: en las redes sociales, en la radio, en el celular, en la TV, a través de Spotify y distintas aplicaciones de streaming.
En esta época, las redes sociales están dominado todo: Facebook, Instagram, X, YouTube y TikTok marcan tendencias y veo a miles de personas intentar sobresalir, incluso vendiendo su dignidad y su cuerpo, solo por unas cuantas vistas para alcanzar popularidad. Viendo alguno de estos videos, observé que un chavo les pregunta a algunas niñas y niños quién era mejor en la música: Beethoven o Yeri Mua, y en otro video quién les gustaba más: Natalia Lafourcade o Bellakath, y lo sorprendente es que los niños no los conocían, esto se debe a que son víctimas de las redes sociales y se interesan por todo lo que marca tendencia. Lo que demuestra que no porque a todos les guste algo es lo mejor. Un ejemplo son las moscas, muchas están en la mierda y no por ello es lo mejor.
La música hoy en día no es la mejor, es obscena y se denigra a la mujer, y es muy explícita en materia de relaciones sexuales, como el caso del reguetonero Dani Flow.
Por eso digo que se están perdiendo los valores musicales, se está perdiendo esa pequeña esencia musical, en algunos casos ya no son personas preparadas las que cantan o componen, ya es cualquier persona que sale en un video que se hace tendencia, por eso tenemos que poner atención en esto; es decir, a las personas que apenas se están formando se les debe de inculcar los valores que se están perdiendo y dejarles un buen rock.
Como en cada columna te mando un fuerte abrazo. Cuídate y protégete por lo que más quieres. Hasta la próxima.
Santiagoobregon.o@gmail.com