Un flujo ininterrumpido de personas recorrió las calles y miles se congregaron en diversas plazas del país, destacando la Ciudad de México como epicentro de la manifestación más grande. Los participantes coreaban consignas e insultos sin restricciones de tránsito, expresión o ideas: “Fuera López; Narcopresidente; Comunismo no, el INE no se toca”. Algunos, en entrevistas televisivas, expresaban su deseo de vivir en una verdadera democracia, protegerla y garantizar que sus hijos puedan transitar libremente por las calles.
A pesar de haber sido una destacada marcha de la sociedad civil, un ejemplo de participación ciudadana, no se libró de políticos oportunistas como Carlos Medina, el exgobernador espurio, carente de autoridad moral para hablar de democracia, Markito, Chuchito Zambrano y otros más que contaminaron la esencia de la Marcha Rosa. Sin embargo, esta marcha también sirvió como testimonio de las libertades presentes en México, un aparente oxímoron respecto a las demandas expresadas.
En un escenario de gobierno autoritario, una marcha pacífica sin violencia y la libertad para expresarse como lo hicieron, incluyendo los medios de comunicación, no habrían sido posibles. Todo esto pudo suceder gracias a vivir en una democracia. El expresidente del Instituto Nacional Electoral, Lorenzo Córdova, mencionó en tribuna que el presidente López Obrador parece querer destruir la escalera que lo llevó a la Presidencia. Es necesario reflexionar si la democracia, para Lorenzo, se limita al INE que el Gobierno pretende reformar, o si su esencia reside en los 56.6 millones de mexicanos que votaron en 2018, dando a Morena la mayoría absoluta con el 53.20%.
La democracia, un concepto fundamental en la teoría política contemporánea, se presenta como el sistema de gobierno preferido por muchas naciones en el mundo. Sin embargo, su definición y práctica a menudo se ven envueltas en una nebulosa de abstracción y demagogia, desafiando la comprensión clara y la implementación efectiva.
La abstracción de la democracia radica en su naturaleza conceptual, donde la participación ciudadana, la igualdad y la libertad son los pilares fundamentales. Se erige como un ideal que busca dar voz a todos los ciudadanos, asegurando que la toma de decisiones refleje la voluntad de la mayoría del pueblo. Sin embargo, la realidad democrática rara vez alcanza esta utopía conceptual…
La demagogia, un elemento corrosivo que puede infiltrarse en el corazón mismo de la democracia, se manifiesta cuando los líderes políticos manipulan la opinión pública mediante el miedo para obtener votos y seguidores. El discurso demagógico a menudo explota y amplifica las emociones en lugar de abordar los problemas de manera objetiva y racional.
La democracia es un concepto mucho más amplio que la reducción conceptual que Lorenzo Córdova pretende vender a los votantes sobre el INE. Algunos principios fundamentales de la democracia incluyen la soberanía popular, el pluralismo político, los derechos individuales y elecciones libres. Estos principios protegen los derechos y libertades fundamentales de los ciudadanos, asegurando que la democracia no se limite a un ente burocrático, sino que abarque la participación activa y diversa de la sociedad.
En conclusión, la democracia es un sistema dinámico que evoluciona y se adapta a las necesidades cambiantes de la sociedad. Sin embargo, es crucial cuestionar el verdadero propósito de la Marcha Rosa. Aunque hubo diversas expresiones, pasiones e ideas, todas convergieron en un denominador común: la marcha no fue a favor de algo, sino en contra de AMLO, una manifestación de animadversión y odio hacia el Presidente.
La Marcha Rosa fue un éxito en términos de facilitar a los ciudadanos ejercer su pleno derecho de expresión. Esperemos que eventos como este impacten en un aumento de simpatizantes, ya que marchas anteriores, con un segmento poblacional similar, no influyeron significativamente en las preferencias electorales.
Por otro lado, Claudia Sheinbaum, desde el Instituto Nacional Electoral, declaró: “Hoy me inscribí como candidata a la Presidencia de la República y hago un llamado al pueblo de México para consolidar y profundizar la Cuarta Transformación de la vida pública. Esto significa seguir construyendo un México menos clasista, más justo, libre, fraterno y democrático”.
El 1 de marzo iniciará formalmente la campaña presidencial, y para senadores y diputaciones federales. Según el promedio de encuestas, a Claudia Sheinbaum le dan una ventaja sobre Xóchitl Gálvez de 25 puntos, es decir, aproximadamente 15 millones de votos que la candidata de la oposición tendría que remontar en 90 días naturales. Así, el 2 de junio se manifestará en las urnas la pluralidad de pensamiento, esencia de la democracia.
Cada persona votará según la intención de su conciencia, ya que la democracia permite que algunos candidatos sean vistos como buenos por unos y malos por otros.