Corría el minuto 67 y los fantasmas comenzaban a rondar en el Estadio de la Ciudad de los Deportes. Pumas, al frente por la mínima desde el 51’, agobiaba a un Cruz Azul semi noqueado que sufría en cada embate auriazul.
En un afán de reforzar su línea ofensiva, Martín Anselmi optó por un cambio que respondió al cansancio de Uriel Antuna, pues tras perderse una opción clara de gol en la primera mitad, fue sustituido por Alexis Gutiérrez.
El leonés de 24 años de edad que se formó en Chivas y empieza a brillar en la Máquina, fue la definición perfecta de revulsivo en la vuelta de los 4tos de Final. Al 76’, justo nueve minutos después de su ingreso, giró sobre su propio eje dentro del área para sacar un izquierdazo que movió las redes y provocó la efusividad de sus compañeros y afición.
Ese gol cayó como anillo al dedo. Significó la tranquilidad absoluta de los cementeros y su clasificación a semifinales. Sin embargo, su aportación no quedó solamente en eso. En 23 minutos, tocó nueve veces la pelota y tuvo un 80% de efectividad en sus pases al acertar cuatro de cinco oportunidades.
En liguilla, frente a su gente y portando una camisa con mucho peso en el balompié mexicano, Alexis, quien fue nombrado MVP del juego por la propia Liga MX, vio cómo su esfuerzo comienza a ser recompensado con reflectores.
Y es que su historia, que comenzó de manera profesional en 2014, es un ejemplo de combatividad y disciplina.
Durante cuatro años, Gutiérrez fue parte de las fuerzas básicas de Chivas en sus categorías sub 15 y sub 17. Entre 2014 y 2018, disputó nueve instancias de Fase Final y pudo levantar el título en solo una: en el Apertura 2016, cuando jugó de titular en los seis juegos, anotó gol en uno y fue clave en la vuelta de la final en Monterrey ante Rayados, donde levantó el título de campeón junto a sus compañeros gracias a un 0 a 1 global que se definió en el mismo juego.
Gracias a su rendimiento, comenzó a llamar la atención de varios clubes, pero fue Cruz Azul quien entró al quite por hacerse de sus servicios ante la falta de actividad en el primer equipo rojiblanco.
No obstante, desde su llegada en el Clausura 2019 y hasta su partida en el Apertura 2021, la historia siguió siendo la misma. Rotando su juego entre la sub 20 y el primer equipo, no disputó ningún minuto en la liguilla del Guard1anes 2021, donde la Máquina rompió una sequía de más de dos décadas sin título.
Por eso, al finalizar el Apertura 2021, regresó a sus orígenes: Tapatío, filial de los rojiblancos en la Liga de Expansión MX.
Aquello fue un simple retorno para encontrarse a sí mismo, crecer como jugador y regresar al Azul para el Clausura 2023.
Después de pasar de inadvertido por Ricardo Ferretti, Anselmi ha depositado la confianza que necesitaba para sobresalir y potenciar su nivel.
En la fase regular del Clausura 2024, contabilizó 881 minutos de juego en cada una de las 17 jornadas en las que vio acción.
Entendiendo su labor de revulsivo, disputó apenas 32 de los 180 minutos de la serie contra los universitarios, empero, su accionar fue aplaudido por los aficionados celestes al darles el pase a semifinales.
Ahora, después de un mayúsculo desgaste físico en la ida y vuelta de la antesala de la final ante los Rayados de Monterrey, Gutiérrez obtuvo su premio y es parte de un plantel que buscará la décima estrella en la historia de la Máquina ante las Águilas del América, que buscan el Bicampeonato.
¿Podrá ser artífice de un posible campeonato para el Cruz Azul?