Manuel Alcantar y Emanuel Alcantar, padre e hijo, protagonizaron emotivo encuentro de fútbol que tuvo como escenario el estadio “El Molinito”. Esta convivencia deportiva unió a 2 generaciones, una para retornar a las canchas y la otra para decir adiós al balompié.
Emmanuel Alcantar “Tito” y Manuel Alcantar “El Padre”, dos figuras del balompié local convocaron la presencia de amigos con los que volvieron hacer equipo dentro del terreno de juego que los vio nacer y crecer como futbolistas. El resultado del juego de homenaje-despedida fue de 8 goles a 2 a favor de la escuadra que comandó “Tito”.
Emmanuel Alcantar “Tito”, debutó con el equipo de Cruz Azul a sus 18 años, teniendo un paso trascendente en la Sub 15, 17 y 20 de la Selección Mexicana de Fútbol, ganando múltiples campeonatos a nivel nacional, e internacional. Con esta trayectoria, ha logrado posicionarse como una de las jóvenes leyendas del fútbol en Salamanca, un referente para las nuevas generaciones.
“Este momento es también muy especial para mí, festejando la jubilación de mi papá, se volvió todavía más especial, por todas las personas que se reunieron e hicieron posible este partido, lo hicieron todavía más especial, sin importar el resultado”.
“Todo esto fue extraordinario, para mí lo más especial fue haber jugado con mi papá tanto de rival, como en mi equipo con él, es la segunda ocasión que he compartido con él en toda mi vida, llevaba muchos años anhelando este partido y espero que no sea la última vez que pueda compartir la cancha con mi papá”, mencionó Emanuel “Tito” Alcantar.
Manuel Alcantar, “El padre”, con este partido, cierra un ciclo en su vida como docente, luego de 28 años de trabajo como docente, frente a cientos de estudiantes que ahora, lo recordarán como parte de su formación profesional y personal.
“El Padre” invitó a quiénes alguna vez fueron sus compañeros en el seminario, con quienes recibió la bendición dentro del terreno de juego.
“Esta es una ocasión muy especial, saber que se reunieron maestros compañeros míos, que conocieron a ‘tito’ chiquito, que jugaron conmigo en las ligas especiales y a parte que me jubilo, 28 años de docente, para mí es un momento muy especial” mencionó Manuel Alcantar.
Un encuentro entre padre e hijo, que más allá de los resultados, dejó ver en la cancha a dos personas, a dos deportistas unidos por la devoción y el amor al fútbol.
NAGC