Transportistas, ejidatarios y empresarios del sector minero de Zimapán pideron la intervención inmediata del gobierno estatal y federal para solucionar el problema de violencia generado por un sindicato.

Señalaron que actualmente están cerradas seis empresas mineras por el conflicto social lo que conlleva pérdida de empleo y derrama económica de miles de dólares.

“Nos están desestabilizando al municipio. Vivimos de la minería metálica y no metálica”, expresaron.

TEMEN PÉRDIDA DE EMPLEOS 

Indicaron que el sector de transporte, los epresarios mineros, autoridades municipales y el pueblo de Zimapán están luchando por el empleo de miles de personas.

“No queremos formar grupos de autodefensa”, manifestaron en conferencia de prensa ante la falta de seguridad en el municipio.

Agregaron que no son violentos, pero no han sido escuchados ni atendidos como debe ser, y sólo piden que los dejen trabajar.

De acuerdo con los quejosos, la minería genera 75 por ciento de economía en Zimapán, con mil 200 empleos directos y más de 4 mil indirectos.