En León el desarrollo vertical ha tenido un crecimiento del 100%, en los últimos cinco años.
La ciudad cuenta con 52 edificios en construcción, que contarán con más de 15 pisos, proyectos que incluyen un centro comercial en complejos de más de una torre.
Esta tendencia en menor volumen se está trasladando a colonias urbanizadas como Arbide, Centro, Andrade generando un concepto de plusvalía.
Es como el que se ofrece en la colonia Condesa, de la Ciudad de México, enfocado a la gentrificación, que surge de la rehabilitación urbana, provocando un desplazamiento de los vecinos empobrecidos, por otros de un mejor nivel socioeconómico.
Esta iniciativa tiene eco entre los jóvenes que buscan independizarse, incluso en aquellos que ven una oportunidad de inversión, señaló Víctor Manuel Franco Vargas, titular de Canadevi Guanajuato.
Explicó que en las colonias se están derribando casas para convertirlas en departamentos, incluso aprovechando lotes dentro de la mancha urbana.
“Es algo natural en ciudades grandes como León, una de las más pobladas del país con el encarecimiento de la tierra, es parte de la densificación”.
Cada vez hay más jóvenes que no se quieren casar, y buscan un departamento bien ubicado en el que puedan transitar caminando, es la tendencia de la ciudad.
Reconoció que los desarrolladores, cada vez más, compran terrenos para convertirlos en departamentos.
Puntualizó que los jóvenes están conscientes de que necesitan un patrimonio y deben aprovechar su edad productiva, una inversión a largo plazo.
“No hay mejor patrimonio que adquirir una vivienda”.
Franco Vargas señaló que en ocasiones la compra de departamentos entre los jóvenes no es para habitarlos, sino para rentarlos y que se paguen con ese ingreso.
En los últimos tres años el desarrollo de vivienda vertical ha ido aumentando, en niveles superiores a los diez pisos.
“Hay mucha necesidad de vivienda, jóvenes que están interesados en independizarse están buscando opciones. El mejor instrumento de inversión es una casa”.