La pandemia por COVID-19 dejó sin trabajo a Gabino Banda Sierra, quien hoy volvió a representar a Jesucristo en el Barrio de San Miguel de Celaya como forma de agradecimiento tras superar la crisis.
Este año es para agradecer el que todavía sigamos aquí, volver a tener trabajo y tener familia, a mi esposa y a mis cuatro hijos, y que de salud estemos bien todos”, compartió.
Gabino Banda Sierra, de 48 años y de oficio impresor, trabajaba en una librería, sin embargo en marzo de 2020 se quedó sin trabajo a raíz del cierre de escuelas por la pandemia de COVID-19.
“Estuve hasta diciembre del año pasado sin chamba, mi trabajo de ahora es de lo mismo pero me costó mucho trabajo poder encontrarlo”, admitió.
Hace justo 20 años, Gabino Banda representó por primera vez a Jesús en el viacrucis del Barrio de San Miguel y durante este lapso lo ha personificado en siete ocasiones.
“La primera vez que participé en 2001 fue por una invitación de Jorge Gómez, que era el Cristo del barrio en esa época, y ese año salí nada más como soldado y me sirvió para ver cómo era el papel de Cristo y al siguiente año recibí el papel principal y fue con una gran motivación, todo lo hago con mucho orgullo, el representar un papel de este tipo”, afirmó.
Desde muy joven, Gabino tuvo gusto por el teatro, por lo que ha participado en decenas de puestas en escena que le dieron las bases para representar a Jesús.
“Conozco el escenario y por eso no se me ha hecho tan difícil representar un papel así. Siempre me ha gustado estar arriba de un escenario, yo estuve en el Grupo Teatral de Celaya donde hicimos obras infinitas como pastorelas, obras para drogadictos y ahí aprendí a desenvolverme”, relató.
Desde la primera ocasión que escenificó la pasión, crucifixión y muerte de Jesucristo, Gabino supo que era una gran responsabilidad hacerlo y para este año tuvo que bajar 11 kilos.
Es una responsabilidad grande porque la gente observa tu actitud y cómo llevas tu vida y la misma gente, cuando saben que voy a salir, están de acuerdo de que sí lo represente”, destacó.
Este año, la representación del viacrucis en el Barrio de San Miguel que tiene más de 60 años de realizarse, reunió a 65 participantes de los cuales 30 son niños, ante la poca participación de los adultos.
“Los adultos casi no nos quisieron seguir este año, nuestra base ahora son los niños a quienes les inculcamos el perder el miedo, hay niños desde los 11 años que se saben el libreto mejor que nosotros. Hay interés de los adultos pero el problema son los tiempos, ensayamos casi dos meses y es imposible fallar en el trabajo por ensayar”, explicó Gabino Banda.
Es por ello que este año el recorrido de las tres caídas en el Barrio de San Miguel fue más largo para buscar involucrar más a la comunidad.
El recorrido inició al mediodía de este viernes en la calle Diego Rivera, siguió por Mutualismo, Antonio Rábago, 10 de Mayo, Río Lerma, Emeteria Valencia, Bulevar Adolfo López Mateos, Francisco Javier Mina y volvió a llegar al atrio de la parroquia.
Durante el recorrido, Jesús estuvo acompañado por su madre María, quien este año fue representada por Karen Denisse.
Poco después de las dos de la tarde y bajo un intenso calor de 31 grados centígrados, Jesucristo fue crucificado junto a Gestas, personificado por Enedino Rangel, mientras que a su derecha fue crucificado Dimas, quien fue representado por Hugo Iván Vera.
MGL