El Anillo de Fuego podría ser el responsable de los sismos que han conmocionado a nuestro país los últimos días. A pesar de que muchas personas se lo adjudicaron a la famosa ‘ley de la atracción ‘ porque coincidieron con una fecha icónica, las placas tectónicas que conforman el Anillo de Fuego podrían sonar a una explicación más racional. Pero, ¿de qué se trata este anillo?
El Anillo de Fuego
Se trata de una larga superficie de 40,000 kilómetros de extensión y se encuentra sobre el Océano Pacífico, según datos de la UNAM. También se le conoce como cinturón de fuego, ya que el 75% de los volcanes activos en la tierra se encuentran en esta región.
Este “cinturón” o “anillo” se forma por una cadena de placas tectónicas que atraviesan muchísimos países de Centroamérica, México, Estados Unidos, Canadá, Rusia, Japón, Taiwán, entre otros.
¿Qué placas tectónicas lo conforman?
El Anillo de fuego está en contacto con el borde que rodea las placas tectónicas de Nazca y Cocos, en el límite occidental de América. También con la gran placa del Pacífico en Norteamérica y en una gran parte de Asia, al mismo tiempo que coincide con las placas Filipina e Indoaustraliana.
¿El Anillo de Fuego afecta a México?
Por la zona que el Anillo de Fuego atraviesa en México, se le liga mucho con el proceso de hundimiento de las placas tectónicas, una debajo de otra, lo cual provoca una alta actividad volcánica y sísmica.
La placa de Cocos y la microplaca Rivera se deslizan debajo de la placa de Norteamérica provocando fricciones y rupturas estruendosas que se traducen en temblores. Este fenómeno no es algo nuevo, Raúl Valenzuela Wong, investigador de la UNAM, asegura que este movimiento se da desde hace millones de años y seguirá ocurriendo y el hecho de que los temblores se presenten en una misma fecha no es más que una coincidencia.