Según la tradición cristiana, los Reyes Magos pudieron encontrar a Jesús gracias a que la Estrella de Belén les indicó el lugar exacto.
Dejando de lado el debate social acerca de la existencia de Jesús o la veracidad de las Sagradas Escrituras, identificar a la Estrella de Belén es un enigma que sigue intrigando a los astrónomos hoy en día. Incluso si habláramos de un mito, la ciencia trata de explicar cómo es que tres sabios provenientes de Persia, India y Arabia vieron un astro tan brillante en el cielo que los condujo hasta el pesebre.
Algunas teorías sobre la Estrella de Belén
Aunque es un poco difícil saber qué evento astronómico fue el que en realidad ocurrió, pues no se tienen registros científicos, los expertos de nuestros días apuestan por algunas teorías.
La primera sugiere que lo que vieron los magos fue en realidad un cometa que pasó muy cerca de nuestro planeta, generando un gran resplandor.
Por otro lado, el astrónomo Michael R. Molnar apunta a que en esa noche es posible que Júpiter se posicionara al este de constelación de Aries y de esta manera el planeta reflejó con mucha intensidad la luz del sol.
La teoría más aceptada
Hay una estrella que desde la antigüedad es reconocida por su gran brillo y que incluso era un punto de referencia para los navegantes. Se trata de la estrella Sirio, que se ubica muy cerca del Cinturón de Orión.
El tamaño de la que podría ser la Estrella de Belén ya que se encuentra cerca de nuestro sistema solar, además de que su tamaño es dos veces más grande que el del Sol.
Es así que los científicos creen que el verdadero nombre de la Estrella de Belén podría ser Sirio.