La Sábana Santa, que supuestamente cubrió el cuerpo de Jesucristo después de que muriera en la cruz, para posteriormente resucitar a los tres días y sorprender a sus fieles, fue utilizada para recrear su figura miles de años después.
De acuerdo con un artículo del Clarín, se recreó el cuerpo completo y el rostro de Jesucristo a través de la imagen impregnada en la Sábana Santa utilizando medicina forense.
Y esta figura es exhibida actualmente en la Catedral de Guadix, Granada, España, hasta el 30 de junio, para la visita de todos los fieles católicos y cristianos.
Por su parte, la Sábana Santa se conserva en Turín (Italia) y permitió recrear mediante látex y silicona los 250 golpes, 150 latigazos, las heridas por la corona de espigas y la azada en el costado del que habría sido crucificado en Jerusalén.
La imagen es tan detallada y realista, que ha conmovido a los feligreses que ya tuvieron oportunidad de verlo, a punto de hacerlos llorar porque es impactante el daño físico que sufrió Jesucristo.
“Es como si estuviera viendo a una persona real, una persona que acaba de sufrir ese suplicio”, explicaba un sacerdote en un video oficial que hicieron de la exhibición.
Álvaro Blanco, comisario de la exposición, describió al medio andaluz la importancia del estudio de la Sábana Santa que se encontró en Europa en el año 1353.
“Las nuevas tecnologías permiten tener más datos que antes. Y al recorrer la Sábana con una cámara en modo negativo, la imagen se ve completamente real”, comentó Blanco.
“Por primera vez no se trata de una interpretación artística, sino de un reflejo de lo que realmente fue Jesús de Nazaret”.