Rusia. Cuando se pensaba que había pasado la tempestad, parece ser que sería todo lo contrario, ya que autoridades de Salud han dado a conocer que en cuestión de horas se reportaron en un día más de 121 mil casos nuevos de COVID.
La comisión a cargo de la crisis del coronavirus reportó 121.288 casos nuevos en las 24 horas pasadas, una cifra sin precedente y 8.000 más que el día anterior. Las tasas de infección en el país se han disparado desde enero, cuando el promedio era de unos 15.000 casos nuevos diarios.
La comisión añadió que 668 personas murieron de COVID-19 en las últimas 24 horas, con lo que el saldo total de muertes por el virus en Rusia asciende a 330.728, de lejos el más alto de Europa.
Pese al aumento de casos nuevos, las autoridades se han abstenido de imponer más restricciones a la actividad social, afirmando que el sistema de salud está en capacidad de lidiar con el número de pacientes.
Días atrás, el parlamento se abstuvo indefinidamente de imponer restricciones contra los no vacunados, lo que hubiera resultado sumamente impopular entre la población que no ha recibido la inyección.
Esta semana las autoridades redujeron el período de tiempo que una persona debe permanecer aislada en caso de entrar en contacto con alguien que tiene COVID-19, de 14 días a siete, sin ofrecer explicación alguna.
Rusia ha impuesto solo un confinamiento colectivo a nivel nacional, en el 2020, aunque parte de la población recibió órdenes de no ir a trabajar en octubre ante un repunte en los números de casos y decesos.
En Canadá se manifiestan por obligar la vacuna y cubrebocas
Miles de manifestantes se reunieron el sábado en la capital de Canadá para protestar contra los mandatos de vacunación, mascarillas y confinamiento.
Algunos estacionaron sus vehículos en el sitio del Monumento Nacional de Guerra y bailaron en la Tumba del Soldado Desconocido, otros portaron pancartas y banderas con esvásticas y algunos usaron la estatua del héroe y activista canadiense Terry Fox para exhibir una declaración antivacuna, lo que generó una condena generalizada.
Me enfadó ver bailar a los manifestantes en la Tumba del Soldado Desconocido y profanar el Monumento Nacional de Guerra. Generaciones de canadienses han luchado y muerto por nuestros derechos, incluyendo la libertad de expresión, pero no esto. Quienes estén involucrados deberían bajar sus cabezas de vergüenza”, tuiteó el general Wayne Eyre, jefe del Estado Mayor de Defensa de Canadá.
Algunos de los manifestantes compararon los mandatos de vacunación con el fascismo, un camión portó una bandera confederada y muchas personas sostenían letreros con improperios contra el primer ministro Justin Trudeau.
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