León, Guanajuato.- La música de cámara regresa al auditorio Mateo Herrera con el concierto del Coromell Ensaemble, que interpretará obras escritas por dos miembros de una de las familias de compositores más relevantes de la historia: los Bach.
Integrada por los mexicanos Jazmín Rincón en la flauta traversa, Santiago Álvarez en el clavecín y Stephanie Hunt en el violonchelo, esta agrupación dedicada a la interpretación de la música de cámara del barroco, con un enfoque historicista, ofrecerá un único recital este sábado 7 de febrero a las 19:00 horas en el mencionado escenario del Forum Cultural Guanajuato.
Los tres miembros del Coromell Ensaemble hicieron sus estudios en la Hogeschool voor de Kunsten Utrech, en Holanda, y se han presentado en diversas salas y festivales en países como México, Estados Unidos, Holanda, España, Alemania, Guatemala, Perú, China, Malasia e Indonesia.
El trío se especializa en la interpretación históricamente informada, basada en la investigación del contexto histórico y del estilo de la música antigua, y que implica tocar con copias de instrumentos de la época para ofrecer una lectura “auténtica”, es decir, la ejecución hipotética que hicieron los propios creadores y los primeros intérpretes de las obras.
Esta práctica comenzó a promoverse en Europa en la segunda mitad del siglo XX y empieza a difundirse en México.
Alargan festejo
Para el recital de mañana, el ensamble presentará un programa que fue estrenado el año pasado en el Encuentro Internacional de Música Antigua del Centro Nacional de las Artes y que estuvo dedicado al compositor Carl Phillip Emanuel Bach (1714-1788), en conmemoración del 300 aniversario de su nacimiento.
“Fue un músico que realmente ha sido muy opacado por la sombra de su padre, dejó muchísima música que puede ser comprendida por la sociedad actual; trabajó en la corte y fue una persona clave para la sobrevivencia de la obra de su padre”, comentó la flautista Jazmín Rincón.
El segundo de los siete hijos de Johann Sebastian Bach y Maria Barbara Bach representa un pionero de la obra de la Primera Escuela de Viena, de estilo clásico, distante del lenguaje polifónico de su padre, y contribuyó al desarrollo del instrumento de teclado con cambios abruptos de tempo, dinámicas y modulaciones, así como con temas contrastantes y silencios prolongados.
Por la enorme libertad y capricho de su armonía, melodía y ritmo, C.P.E. Bach es considerado representante del “Empinfsamer Stil” (estilo expresivo), similar al movimiento literario “Sturm und Drang” (tormenta e impulso) y que anuncia el romanticismo del siglo posterior.
De este compositor alemán, Jazmín Rincón y Santiago Álvarez interpretarán dos Sonatas para flauta y bajo continuo, una en Re mayor Wq 131/H. 556 y la otra en Sol mayor Wq 134/H. 548, escritas en 1740 y 1736, cuando el entonces joven compositor era uno de los clavecinistas más importantes de Europa y cuya reputación quedó establecida al formar parte de la corte de Federico “El Grande” en 1740 en Berlín.
También ejecutarán la Sonata para flauta y clavecín obligado en sol menor, que también es atribuida a Johann Sebastian Bach y que está catalogada como la Sonata para violín (flauta) y clavecín BWV 1020. Sin embargo, por la forma y estilo, se considera que la obra fue compuesta por C.P.E. Bach, antes de 1735.
Honran al Padre de la Música
Además, el Coromell Ensaemble dedicará un espacio del concierto para tocar dos obras del padre de la música moderna: Johann Sebastian Bach (1685-1750).
Primero, Stephanie Hunt interpretará la Suite número dos para violonchelo en Re menor BWV 1008, de las seis famosas suites para este instrumento que representan la culminación de la contribución de las danzas populares durante el siglo XVI. Además, con estas obras el instrumento adquirió una independencia y variedad de lenguaje que nunca antes se había escuchado.
Escrita probablemente en 1720, cuando Bach era kapellmeister (maestro de capilla) en Cöthen, Alemania, la segunda suite está integrada por un preludio y los movimientos de danza: allemande, courante, sarabande, dos minuetos y una giga, en las que predomina un carácter triste y dramático, con el uso expresivo de las dobles cuerdas.
También Santiago Álvarez rendirá un homenaje al legado de Johann Sebastian Bach ejecutando el Preludio y fuga para clavecín número 10 en mi menor BWV 855 del primer volumen del Clave bien temperado, escrito en Cöthen en 1722.
Los dos libros de esta obra monumental constituyen la generalización del sistema temperado, al componer 48 preludios y 48 fugas en todas las tonalidades mayores y menores de la gama cromática.
Actualmente, el Coromell Ensaemble trabaja un proyecto multidisciplinario para la edición 43 de este año del Festival Internacional Cervantino (FIC) y que tiene que ver precisamente con el arte de la fuga de Johann Sebastian Bach.