León, Guanajuato.- Fue la primera vez que el Panteón San Nicolás se convirtió en una sala de cine que llevó a más de 200 espectadores a vivir la experiencia de una película de terror en un camposanto.
El Festival Internacional de Cine de Guanajuato (GIFF) realizó por primera vez en la ciudad su “Cine Entre Muertos” con “Luzifer”, película de terror basada en un exorcismo real.
La película se centra en dos personajes: un joven hipersensible llamado Johannes (interpretado por Franz Rogowski), que no ha perdido su inocencia infantil, y su devota madre, una exalcohólica y drogadicta que lucha contra sus adicciones.
Entre el terror psicológico, los asistentes comenzaron a sentir cosas en el cuerpo, pero no eran más que las cucarachas que se subieron en las sillas y provocaron cosquilleos en manos y piernas.
Entre otros ruidos, se escucharon el rechinar de una puerta cerca del sitio de los baños móviles, justo en la zona donde descansan los restos de los niños.
Se cuenta que en ese panteón se parece el ánima de un niño que busca jugar con los que acuden al camposanto. Eso causó curiosidad entre los asistentes.
Algunos de los presentes, no soportaron la película, ni los zancudos, por lo que abortaron la misión de soportar más de una hora sentados en las sillas de plástico.
¡Yo te cuido! No tengas miedo”, le dijo una novia a su enamorado.
Los ruidos que parecían extraños, no eran más que el sonido de las papitas y los refrescos que metieron entre las bolsas.
Conforme pasó el clímax de la película, elementos de seguridad, de Protección Civil y el crew del festival se tomó un tiempo para ver la película dirigida por Peter Brunner.
Algunos fumaron cigarros, otros vivieron momentos de paz, a pesar del terror de la película.
“Este lugar se me hace muy tranquilo”, se escuchó entre los murmullos.
Entre las tumbas, los sonidos de pequeñas piedras cayendo, las flores secas crujiendo, obligaban a voltear a ver. Se trataba de cucarachas recorriendo las tumbas, y haciendo de las suyas.
Entre el terror, también hubo risas
Las risas de los sepultureros contando chistes fue otro distractor, no tan grande como el de las llamadas telefónicas para avisar que no llegarían a casa temprano.
“Sí, me voy a quedar hasta que se acabe, como a la una de la mañana”, dijo una chica al teléfono.
Desde toreros, servidores públicos en perpetuidad, además de figuras como el arquitecto Luis Long descansan en ese sitio, que por más de 5 horas fue un cinema que mantuvo en suspenso con su vibra.
La gente que no alcanzó un lugar, esperó fuera del panteón ubicado sobre Mariano Escobedo, en la colonia San Nicolás.
La segunda película sería “Bingo Hell”, que trata sobre un nuevo bingo que llega a una comunidad de adultos mayores. El anfitrión del lugar se revela como una figura siniestra y el lugar emana un aura malvada.
LCCR