Anoche, el Festival Internacional Cervantino y la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Guanajuato (OSUG) estuvieron de manteles largos con el magno concierto que hubo en el Teatro Juárez.
La Octava Sinfonía de Gustav Mahler o “Sinfonía de los mil” fue el programa elegido para que la OSUG se luciera en la edición número 50 del festival, pero también existía otra razón muy especial: con esta pieza el director titular de la orquesta, Roberto Beltrán Zavala, concluyó el ciclo de sinfonías de Mahler que, además de otras razones, lo hicieron acreedor al Premio Mahler.
Después de que el concierto iniciara con “Poema del éxtasis” de Alexander Scriabin, como parte del festejo de la OSUG por su 70 aniversario, Betrán Zavala subió al escenario acompañado de Francisco Bricio y Arturo López, autoridades de la Mahler Foundation y la Sociedad Mahler, así como de Adriana González, encargada de relaciones públicas de la orquesta.
“El premio Mahler se ha otorgado a un muy reducido número de individuos, pues por hoy, una de las más prestigiadas distinciones en el mundo del arte y la cultura. A lo largo de varios años, hemos tenido el privilegio de seguir de cerca la carrera del maestro Roberto Beltrán Zavala y las actividades internacionales lo han posicionado como un director de primer nivel, profundamente comprometido con el arte, los creadores y su público.
“Su quehacer musical ha sido de gran inspiración. Es por eso, que hoy nos congratulamos en anunciar que la Sociedad Mahler y la Mahler Foundation le otorgan el premio Mahler al maestro Roberto Beltrán Zavala”, comentó Francisco Bricio en la entrega del reconocimiento.
En medio de los explosivos aplausos de la audiencia y visiblemente emocionado, Beltrán Zavala recibió en sus manos el premio y lo levantó con orgullo, ofreciéndolo al público y también a los músicos que se encontraban en el escenario. Después de este emocionante momento, el director se dispuso a hacer lo que más le apasiona: tomar la batuta y dirigir su orquesta.
En entrevista exclusiva para AM, el director Roberto Beltrán platicó cómo se sentía al recibir esta condecoración. “Lo recibo con mucha gratitud y también con mucha humildad. Hay que tener cuidado con los elogios, hay que ser siempre humildes. Lo hago extensivo a la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Guanajuato con la que he trabajado intensísimamente por tanto tiempo y con la que he tenido la oportunidad de desarrollar proyectos importantes”, declaró el director.
Sin lugar a dudas, esa noche el Teatro Juárez fue testigo de momentos claves para la historia de la cultura contemporánea en nuestro estado: La Octava Sinfonía de Mahler y la premiación del director titular de la OSUG.
