Los amantes de la danza clásica vivieron una noche espectacular con la “Gala de Ballet” que ofreció la Compañía Nacional de Danza en el Teatro del Bicentenario Roberto Plascencia Saldaña.

En una noche despejada y con un clima ideal, los aficionados a la danza llegaron desde temprano al vestíbulo del teatro. Se observaban familias, parejas, e incluso aprendices de ballet que iban en grupos con sus escuelas. 

Con un programa variado que evidenció la transversalidad que caracteriza a la compañía de ballet más antigua del país. A las 20:00 horas el telón se abrió dejando ver una escenografía que transportó a los asistentes hasta un bosque. 

Dicho escenario correspondía a una de las piezas más representativas del ballet clásico: El lago de los cisnes. Con la música de Tchaikovsky, los primeros en salir a escena fueron el príncipe Sigfrido y las dos doncellas con quienes baila durante la fiesta del reino.

La danza contemporánea también formó parte del programa. Foto: Cortesía Teatro del Bicentenario. 

La siguiente en aparecer fue Odile, el cisne negro, quien a través de su baile logra embelesar al príncipe y logra que este lo proponga matrimonio, olvidándose de Odette. 

Como parte final de esta Suite, un gran grupo de cisnes blancos salió a escena entre los que destacaba la princesa Odette. Durante toda la presentación de este gran clásico, los movimientos de los bailarines fueron precisos y cada postura hecha con el cuerpo mostraba una figura elegante, lo que provocó un estallido de aplausos entre cada interpretación. 

Para aligerar la transición entre el ballet clásico y los estilos contemporáneos, se dio un breve intermedio tras las Suit del Lago de los Cisnes. Afuera del teatro, las pequeñas imitaban los movimientos de Odette y la gente no dejaba de comentar la fineza de la interpretación.

La segunda parte del programa dio inicio con la pareja de bailarines Ana Elisa Mena y Roberto Rodríguez interpretando “Romanza”, coreografía de James Kelly. Esta delicada y conmovedora pieza representa la espera de un amor, de un mejor momento, de nuevas oportunidades. 

Los movimientos de los bailarines fueron precisos y cada postura elegante.
 Aidé López, Valeria Chávez, Adrián Martínez y Grecia Montes de Oca. Foto: Cortesía Teatro del Bicentenario. 

Como siguiente número, Lorena García y Erick Santamarina interpretaron “Planimetría del movimiento”. Esta coreografía de Irina Marcano fue la ganadora del primer lugar del Concurso Interno de Coreografía del INBA en 2015.

Con música de Armand Amar, esta pieza de movimientos mostró una mezcla sobria entre ballet y figuras de la danza contemporánea. 

Para cerrar la gala dancística, los bailarines ejecutaron “All long dem day” una acelerada coreografía del artista alemán Marco Goecke. Esta presentación deslumbró al público, pues permitió que los bailarines demostraran su versatilidad integrando movimientos de danzas urbanas, al ritmo de jazz, blues, r&b y de la potente voz de Nina Simone

Este mes continuarán los espectáculos de primer nivel en el Teatro del Bicentenario, pues después del gran sabor que dejó la Compañía Nacional de Danza, esta noche se presentará la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Yale

 

El escenario del teatro se transformó en El Lago de los Cisnes. Foto: Cortesía Teatro del Bicentenario.

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