Con mucha tristeza los celayenses se enteraron del fallecimiento del reconocido artista urbano Francisco Álvarez, mejor conocido como ‘Don Pancho’, quien tenía más de 40 años vendiendo sus pinturas en las calles del centro de Celaya.
Durante las vacaciones de Semana Santa llamó la atención su ausencia afuera del café Carmel en el andador Góngora, en donde habitualmente colocaba su galería de obras pintadas en discos de acetato, corcholatas y figuras de madera.
La noche del lunes comenzó a circular en redes sociales que había fallecido el también llamado ‘Señor de las pinturas’ y que sería velado en Guanajuato Capital, de donde era originario.
AM pudo corroborar con una sobrina del artista callejero que lamentablemente sí había muerto ‘Don Pancho’ y que este martes estarían celebrando su misa de cuerpo presente en la capital del estado.
Don Francisco llegó a Celaya hace varias décadas
“Toda mi vida me he dedicado a esto, desde los siete años he pintado en diferentes superficies, manta, madera, piedras, azulejo y ahora en discos de vinilo”, contó en una plática con AM en abril del 2023.
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El artista urbano era originario de Guanajuato Capital, pero al casarse con una celayense terminó por adoptar estas tierras como su nueva ciudad y desde entonces pasó más de 40 años vendiendo sus obras en diferentes calles del centro.
Francisco Álvarez tenía 79 años de edad y de acuerdo a personal del café Carmel en donde se ponía casi a diario para vender sus pinturas, en las últimas semanas ya se le notaba más cabizbajo e incluso en algunas ocasiones lo tenían que levantar porque se quedaba dormido.
‘Don Pancho’ vendía sus obras en discos de acetato en 70 pesos y las corcholatas en apenas cinco pesos, afirmando que la postal del “Callejón del Beso” era la que más le pedían y la que más le genera buenos recuerdos.
Aunque también relató que muchas veces tuvo que pedir dinero ya que había días que no le compraban sus pinturas.
Celayenses lo recuerdan con melancolía
La noticia de la muerte del ‘Señor de las pinturas’ se viralizó en redes sociales y gran cantidad de usuarios recordaron con melancolía las obras que llegaron a comprarle a Don Francisco.
“¡Qué tristeza! Le compré varias veces para regalar a personas que viven fuera de México, en la pandemia le conseguimos muchos CDs, y siempre tenía una plática muy amena, QEPD”, comentó María García.
“Antes de que mi marido se fuera a Estados Unidos, dijo que cuando regresara le iba a comprar todas sus pinturas”, escribió Karen Álvarez.
“¡Qué triste noticia! Siempre le compramos pinturas y mandamos para USA también, mi hermana cuando dios la socorría me mandaba dinero para darle a las personas mayores y le daba a él siempre”, apuntó Alejandra Guardiola.
“Ese señor y yo platicábamos tanto cuando trabajaba en ese café, me compartió experiencias y me comentó que solo pintaba lo que iba saliendo de su mente. Veía a Celaya de otra manera”, dijo André Torre.
