El programa Más Escena arrancó con “La Sombra del Ocelote”, una producción multidisciplinaria que reunió el talento teatral del Ensamble de Contrabajos Mushamukas y Ojo Negro teatro.
El Teatro Manuel Doblado fue testigo de un viaje prehispánico a través de las composiciones del músico y director de la agrupación, Rodrigo Mata y el teatro de sombras de la compañía dirigida por Miranda Giles.
En esta colaboración los músicos interpretaron piezas de su último disco, “Profunda Raíz”, con las que musicalizaron la historia de un guerrero ocelote.
El viaje llegó hasta las antiguas pirámides, el inframundo y los dioses prehispánicos, así como a un encuentro con la naturaleza.
Una de las cosas que más asombró al público, fue que los músicos demostraron que los contrabajos no producen sonidos únicamente con las cuerdas ni se tocan nada más con el arco, sino que también usaron el cuerpo del instrumento como percusión, logrando imitar sonidos como el del goteo de la lluvia.
Aunque el montaje mismo proponía la historia, el espectáculo también se prestó a la libre interpretación de los asistentes, que fueron hilando una a una las sombras proyectadas detrás de los músicos.
Al protagonista se le conoció desde el vientre, pues una secuencia mostró desde su gestación hasta su nacimiento. También se supo que su madre murió al darlo a luz y fue recibida por Mictlantecutli en su viaje hacia el más allá.
Pronto, el guerrero fue creciendo y abriéndose paso por el mundo, teniendo que enfrentarse a lobos y serpientes, hasta encontrar su lugar.
La experiencia sonora y visual fue sin duda una colaboración novedosa que además ayudó al público a acercarse a formas de expresión que no son tan habituales: el sonido del contrabajo y el teatro de sombras.
La próxima presentación de “La Sombra del Ocelote” será el miércoles 20 de noviembre, pero esta vez en el Teatro María Grever a las 7 de la noche, la entrada es libre.