Guanajuato.- La ropa de “segunda” que entra al estado de Guanajuato, ahora no solamente ocasionará desempleo en las empresas locales; sino también un problema sanitario, al ser prendas de posibles portadoras de Covid-19 en Estados Unidos.
En tiempos de crisis aumenta considerablemente la compra de ropa de paca y de ropa pirata, lo más complicado es que ahora no solamente es la afectación económica a las marcas locales, sino que pudieran tratarse de ropa de algún fallecido por el virus o portador del mismo, del que sus familias querrán deshacerse de las prendas”
, comentó en entrevista Fernando de la Vega, director de la Canaive del estado.
Dijo que este tipo de ropa ahora no solamente se vende en tianguis, sino también en locales comerciales, por venta en línea y marketplaces como el que ofrece Facebook.
Es un tipo de mercancía que perjudica mucho al sector del vestir en México, y ahora más con la de por sí crisis que está dejando al sector local el coronavirus”.
La industria en México, estima que al concluir la pandemia un 30% de las empresas no vuelvan a subir sus cortinas, situación similar a la que proyecta podría suceder en Guanajuato.
En Guanajuato quizá también lleguemos a un 30%, está muy difícil la situación. No hay producción, no hay pedidos, no hay ventas, y no vemos cuándo vaya finalizar la pandemia”, explicó.
En territorio guanajuatense, la Canaive cuenta con 680 empresas agremiadas que generan empleo a 25 mil personas de forma directa, y en municipios como Moroleón y Uriangato depende de esta industria el 80% de su actividad económica. Compartió que el regreso para los fabricantes, posterior a superar el virus no será nada sencillo, considerando que uno de sus clientes principales, como son las departamentales abrirán las puertas con sobre inventarios y queriendo vender la ropa de primavera-verano.
Pagan en 90 días, y si a eso le sumamos que los pedidos no serán inmediatamente que abran, va a llevar tiempo la recuperación”.