Guanajuato.- Un aumento en los precios de la carne, huevo y toda la cadena de productos lácteos será la consecuencia ante la restricción de importar maíz amarillo modificado genéticamente, decretada por el Gobierno federal.
El subsecretario de Desarrollo y Competitividad en la Secretaría de Desarrollo Agroalimentario y Rural (SDAYR) de Guanajuato, Rodolfo Ponce Padilla, calificó esta decisión como una “tormenta perfecta”.
Este tema se pone nuevamente en debate, -desde su anuncio hace casi un año-, ahora ante la presión de los productores de maíz de Estados Unidos, que piden al gobierno de Joe Biden instalar un panel de arbitraje para revisarlo desde el T-MEC.
Ponce Padilla estimó que en Guanajuato se verían afectados alrededor de 100 mil productores de ganado, con un aumento en promedio del 45% en sus insumos, mismo que se tendría que trasladar al consumidor.
El primer temor es el aumento en los costos de producción, como país no somos autosuficientes en la producción de maíz marillo”, explicó.
Recordó que en el año 2021, México importó 17 millones de toneladas de maíz amarillo que en suma representaron cuatro mil 700 millones de dólares.
Ponce Padilla refirió que el decreto presidencial no está basado en principios científicos.
“Lo verdaderamente grave es que no existiría suficiente maíz para alimentar el ganado del país”, agregó.
Señaló que están preparando un censo de productores y cabezas de ganado para estudiar el impacto que representa para Guanajuato; reconoció que es común que los ganaderos registren menos ganado del que tienen.
La afectación no queda en los ganaderos, al final del día va a afectar el bolsillo de la gente”.
En este sentido puso de ejemplo a los productores de leche para Liconsa, quienes por más que quieran controlar el precio no lo lograrán.
De momento el bulto de forraje de 40 kilos tiene un costo de 500 pesos, sumado al aumento involucrado con la restricción.
“Todos los demás insumos que envuelven la cadena productiva del sector pecuario”, explicó.
El subsecretario adelantó que antes de que termine el año deberán realizar un estudio de impacto.
“Necesitamos que el Gobierno Federal sea empático con el sector, jamás vamos a alcanzar la suficiencia alimentaria con esta decisiones”, finalizó.
MCMH