León, Guanajuato.- Querer que exista un mayor abasto de maíz mexicano disponible para influir en el precio de la tortilla, la solución no es cerrarle la puerta del mercado a productores, sino fomentar su mayor eficiencia y productividad. Porque además esto solamente provocará el incremento de su venta en el mercado negro.
Esta es la opinión de Luis Ernesto Rojas Ávila, director de la Cofoce y Mauricio Preciado Torres, coordinador de Alimentos Procesados de la misma coordinadora que fomenta e impulsa la exportación en Guanajuato.
En el pasado cuando se han generado medidas de esta naturaleza, que son restricciones ya sea a la importación o exportaciones los únicos que salen ganando son los intermediarios que están en capacidad de crear, disfrutar o generar su propio mercado negro”, compartió Preciado.
México impone a partir de ayer un arancel de 50% a las exportaciones de maíz blanco (únicamente para consumo humano y no genéticamente modificado).
El anunció se publicó por la Secretaría de Economía en el Diario Oficial de la Federación (DOF) y el arancel estará vigente hasta el 30 de junio del siguiente año.
Rojas complementó que es importante considerar que ante las medidas de restricción en importación o exportación el mercado encuentra finalmente la forma de abastecerse, entonces si lo vuelves restrictivo o ilegal se desarrollan múltiples formas de brincar esa restricción.
Va a terminar siendo diversificada la producción en donde encuentre el mejor precio. Ya en el pasado se ha intentado y no ha funcionado”.
Notan campo poco productivo
Preciado dijo que actualmente una tierra de temporal, que es la gran mayoría de productores en Guanajuato, está entregando tasas de entre 2 y 3 toneladas por hectárea cuando una finca tecnificada te puede lograr entre 8 y 9 toneladas por hectárea.
La diferencia entre los 2 casos hace que el campo mexicano sea poco productivo en granos, por eso el tema del arancel realmente influirá poco, no es una salida”.
Agregó que en el caso de Guanajuato, el estado forma parte ya de cadenas de suministro mucho más establecidas sobre todo para los productores que están más tecnificados, ordenados y organizados.
Entonces el impacto se ve minimizado porque nuestros productores se ven minimizados, porque nuestros productores tienen pactados precios que por lo menos igualen garantía o supieran con algo. El precio de la garantía actualmente debe estar entre los 6 pesos con 20 centavos y los 7 pesos por kilo, que te da seis mil 200 o 7 mil pesos por tonelada”.
Rojas añadió que definitivamente aunque en Guanajuato se tiene una producción notable no termina de generar una huella tan profunda porque las fincas de grano no son demasiado extensas.
Para que el maíz se vuelva un negocio verdaderamente rentable es necesario o por lo menos deseable tener una producción de 100 hectáreas. Hay mucha microproducción en Guanajuato que va de las 3, 4 hectáreas, 20 hectáreas que es poco lo que genera”.
Propone buscar cultivos alternativos
El encargado del Agro en la Cofoce mencionó que todo esto redondea el punto que nos da la razón.
Terminamos compitiendo con centavos, en un producto que tiene poco valor agregado, que termina teniendo un comportamiento de commodities, en lugar de perseguir producto de mucho mayor impacto económico como las berries o espárragos que por su naturaleza no compiten tanto en precio, sino en términos de valor y calidad. Eso es lo que termina impulsando al agro de Guanajuato a buscar cultivos alternativos o a por lo menos distintas formas de comercialización”.
SM