León, Guanajuato.- De los 85 millones de adultos en México, con cifras de 2020, solo 950 mil tienen cuentas en casas de bolsa, es decir el 1.1 %.
En México la gente no invierte, señaló Roxana Lastiri Rangel, licenciada en Administración Financiera, con maestría en Mercados Financieros.
Financiera y directora del programa de administración financiera en el Tecnológico de Monterrey Campus León, señaló que la cultura financiera en el País es baja, considerando que en Estados Unidos la mitad de la población tiene una cuenta bursátil.
En el segundo día del Foro Mujeres de Canaco SeryTur León, advirtió que ante el panorama financiero actual se deben tomar decisiones inteligentes, para aprovechar las oportunidades.
Explicó que en México el sistema financiero lo administra la Secretaría de Hacienda, de ahí que para invertir adecuadamente las
entidades deben formar parte del sistema financiero mexicano y estar reguladas ante la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
De no reunir esas condiciones, Lastiri Rangel sugirió tener cuidado, porque la probabilidad de caer en un fraude es altísima. No todas las instituciones pueden captar dinero.
Recomendó a quien quiera invertir revisar por lo menos dos indicadores clave, uno de ellos la inflación, porque si el negocio o el sueldo crecen menos que la inflación, alcanza menos. “Deberías crecer al menos en esa proporción”.
El segundo indicador son los Cetes (Certificados de la Tesorería de la Federación), invertir en ellos con un 10.43 % anual, desde 100 pesos, es lo menos arriesgado en este país.
Cuentas bancarias sin movimientos
En México el 80 % de las cuentas bancarias de personas fallecidas, que han dejado de registrar movimientos en una década, no las cobran los beneficiarios.
Roxana Lastiri Rangel recomendó tener claridad en los beneficiarios de las cuentas bancarias, porque “cualquier ejecutivo bancario puede poner su nombre y llevarse el dinero el día que te mueras”.
La especialista señaló que en México no existe una regulación en esta materia, los bancos no dan seguimiento con los beneficiarios, a diferencia de Estados Unidos, donde si una cuenta deja de generar movimiento el banco está obligado a buscar al titular y beneficiario.
En México cuando una cuenta no presenta movimientos en diez años, se pierde. Roxana Lastiri puso de ejemplo una persona cuyo hijo le envió una cantidad considerable de dinero, pero a los 11 años buscó retirarlo y estaba vacía por no tener movimientos.
SM