León, Guanajuato.- El Instituto Federal de Telecomunicaciones acumula más de 11 años de autonomía, y desaparecerlo podría frenar la digitalización y generar barreras en la competencia del sector de telecomunicaciones, alertaron especialistas.
Estaríamos retrocediendo en algunos temas, estaríamos creando incertidumbre jurídica afectando inversiones, posiblemente
no se digitalice más e l País”, advirtió Jorge Bravo, presidente de la Asociación
Mexicana de Derecho a la Información.
Otras consecuencia de extinguir al regulador es que la entrega de concesiones al sector privado estaría sujeta a un tema político y no a la competencia de mercado.
Se tendrían litigios internacionales, porque pueden crearse lagunas regulatorias debido a que ahora la entrega, la revocación o la
renovación de concesiones será un tema político (y no técnico)”, añadió Bravo.
Mony de Swaan, socio fundador del Centro de Estudios e Investigación de Asuntos Públicos, sostuvo que la autonomía del IFT se ha traducido en que consumidores cuenten con una amplia oferta de servicios que no existían 10 años.
SM