Mirna Bañuelos, coordinadora de emprendimiento universitario de la Universidad Iberoamericana plantel León, destacó que la educación en finanzas representa un valor importante en la formación de los perfiles profesionales de los estudiantes.
Agregó que todo ciudadano debería tener un mínimo de formación financiera para tomar mejores decisiones en su vida desde los aspectos básicos hasta los profesionales.
Las instituciones de educación superior incluyen programas de formación financiera que permiten atender la necesidad fundamental de tener elementos que ayuden a medir riesgos y aprovechar la oportunidad de ir construyendo un patrimonio o integrar un emprendimiento que se pueda consolidar a partir de decisiones financieras adecuadas”, mencionó la especialista en finanzas.
Miriam Bañuelos considera que la formación en finanzas debería iniciar previo al ingreso a la educación superior.
“Si en la educación básica se incluyeran temas como finanzas personales se ayudaría a formar ciudadanos con un perfil, no solo de conocimientos sino de herramientas prácticas, que ayudarán a la toma de decisiones en materia económica y financiera que van desde gestionar y usar una tarjeta de crédito sin generar una deuda impagable”.
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Destacó que aunque en la educación superior hay licenciaturas en áreas de negocio como finanzas, economía y contaduría, integradas por profesores expertos que contribuyen a la formación de esos perfiles, los niveles básicos adolecen de esos programas.
“Si se tuvieran ese tipo de programas las personas podrían desarrollar un perfil y hacer uso de herramientas comerciales como sacar una cuenta de ahorro y al adquirir la mayoría de edad e integrarse a la fuerza laboral empezar a construir un patrimonio y un fondo de ahorro, esas decisiones financieras son las que hace falta promover en esos niveles de educación y formación”.
Añadió que en la educación superior tampoco está resuelto el problema, ya que todavía hay programas de licenciatura que no tocan esos temas como es la rama de las humanidades y que se necesitan decisiones de carácter curricular a nivel transversal que impacten.
No solo a quienes estudian en las áreas de negocio, sino a otros perfiles como ingenierías, ciencias de la salud y humanidades, pues antes de ser profesionistas en cualquier área se es un ciudadano que requiere hacer uso de herramientas financieras”, mencionó Mirna.
Comentó que es necesario un esquema de política pública a nivel educación en el que se tendría que estar muy atentos, integrando de manera transversal en los currículum de las diferentes disciplinas ese tipo de conocimientos y herramientas.
La coordinadora de emprendimiento universitario mencionó que es importante que a nivel de política pública la autoridad educativa vele porque exista de manera transversal ese tipo de conocimiento, no solo a nivel de educación superior, también a niveles de educación básica y media superior.
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Resaltó que en la Ibero León tienen una coordinación de emprendimiento universitario que desde el área académica hace todo un análisis de los programas de estudio de la universidad y a partir de las necesidades que detectan, en todo tipo de saberes, incluyen lo necesario.
Si todas las instituciones tuvieran una área en la que de manera transversal pudieran incluir un contenido importante de formación financiera en los perfiles de todos los estudiantes se tendrían resultados positivos, pues todos necesitan herramientas y conocimientos mínimos para gestionar sus finanzas”.
Señaló que además de la formación curricular, hay otro tipo de acciones que conviene promover en las instituciones educativas como el contacto con organismos como la banca privada, cooperativas de crédito y ahorro, asociaciones y colegios de contadores y tener una vinculación cercana para fortalecer la parte formativa de una persona en temas de finanzas.
“Tener el conocimiento de los instrumentos financieros podría permitir echar mano, a partir de la banca tradicional o de la banca cooperativa, de incluir actividades extracurriculares, aterrizar planes y programas de estudio y hacer sinergia con las redes que ya existen de otras instituciones”.
También se podrían ofrecer determinados cursos, seminarios y actividades para formar a los ciudadanos con un contenido sobre el manejo sano de las finanzas y el uso efectivo de instrumentos que ya existen y tener finanzas sanas, que es lo que todos los ciudadanos aspiran, mencionó Mirna Bañuelos, coordinadora de emprendimiento universitario de la Universidad Iberoamericana plantel León.
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