Guanajuato.- Enero del 2022 se convirtió en el mes de mayor creación de empleos formales desde el 2018 en Guanajuato; la entidad ocupa la quinta posición nacional.
Durante enero de este año se recuperaron 8 mil 380 trabajadores afiliados al IMSS con respecto a diciembre del 2021.
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Este aumento mensual ha sido de los mayores considerando los últimos cuatro años previos; regularmente el inicio de año no superaba las 4 mil afiliaciones al IMSS, mientras que el arranque del 2022 duplicó la tendencia.
Durante enero del 2022 se registraron un millón 27 mil 712 trabajadores afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Guanajuato en total.
Esta cifra fue mayor en comparación con diciembre del 2021, cuando sumaron un millón 19 mil 332 empleados. El aumento fue menor al 1%.
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Enero del 2022 inició con una recuperación histórica para la entidad considerando el mismo mes de los últimos cuatro años.
Los resultados de enero del 2022 en trabajo formal ubican a Guanajuato en la quinta posición nacional, por debajo del Estado de México que sumó 1.6 millones de trabajadores afiliados al IMSS.
En el país, Tlaxcala es el estado con menos trabajadores afiliados al IMSS, sumando 102 mil 229 personas.
De acuerdo con el reporte de la OCC Mundial, en la zona del Bajío la industria manufacturera es el sector que más ofertas de empleo genera. Durante el 2021 el 38% de las vacantes las generó esta industria.
Entre los estados que conforman el Bajío, Guanajuato generó el 33% de las vacantes publicadas en el sitio durante el año pasado.
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Trae bebé torta bajo el brazo
Después de un mes desempleado y con la presión económica por el segundo embarazo de su esposa, Jose Ricardo Escobar Torres consiguió empleo en noviembre del año pasado en una fábrica de calzado.
“Estaba batallando para encontrar trabajo”, reconoció.
Explicó que en su trabajo anterior recibía pago a destajo y al reducirse la producción decidió cambiarse previendo los gastos que se vendrían cuando naciera su hijo, pues “ya no le convenía” lo que estaba ganando.
Durante el tiempo que estuvo sin trabajo sus papás le estuvieron ayudando, ya que su esposa estaba de incapacidad por el embarazo.
Refirió que no gana lo que esperaba en su nuevo empleo pero al menos es estable. Durante diciembre no tuvo vacaciones por la demanda de producción en su actual empleo.
Cuando su mujer dio a luz, fue atendida en el Hospital Materno Infantil, servicio que le resultó gratuito. De momento su esposa está de incapacidad a la espera de poder regresar a trabajar, ya que igualmente se desempeña en la fabricación de calzado.
Sigue en la búsqueda
En contraste, José de Jesús Falcón Padilla desde octubre del año pasado se quedó sin empleo.
El obrero de 37 años es cortador de piel. Su último empleo fue en Colorín, empresa dedicada a la fabricación de calzado infantil. Su despido fue por recorte de personal. Recién había cumplido cinco meses.
Esta situación inestable de empleo la ha estado viviendo por la pandemia de COVID. Su último empleo de mayor antigüedad fue en Vaqueras, en donde estuvo año y medio.
“He estado batallando”, admitió.
Tan solo el día que fue consultado había dejado tres solicitudes de empleo; sin embargo, está a la espera de que se abra un espacio. El trabajador es soltero y en los tiempos que se ha quedado sin trabajo uno de sus cuñados lo emplea para fabricar carteras, eso le ha permitido salir adelante.
En casi dos años de pandemia ha sido intermitente el trabajo, explicó.
MCMH