Luego de saberse que Lindsay Lohan y Charlie Sheen volvieron a grabar escenas de cama, se dieron a conocer fotografías del trabajo de los actores en “Anger Management”.
Apenas el martes Lohan tuvo su primer día de grabaciones de la serie, a la que fue invitada por Charlie Sheen.
El sitio web eonline.com publica varias fotografías de los actores en la cama, pues según la historia, Sheen tiene un fugaz romance con Lindsay.
Hace unas semanas se supo que la actriz sería la invitada especial en el programa, también se mencionó que Sheen estaría interesado románticamente en ella, pero él aseguró que sólo quería ayudarla.
Aunque Lohan, de 26 años, llegó 45 minutos antes de su cita al set, ayer trascendió que en su segundo día retrasó varias horas las grabaciones.
Sheen y Lohan ya habían filmado otras escenas de cama para la película “Scary Movie 5”.
Teme papá por su vida
El padre de la controvertida actriz, Michael Lohan, insiste en que su hija necesita ayuda con sus problemas con las drogas y el alcohol, y admite que no le extrañaría que algún día recibiera las peores noticias sobre la salud de su hija si no logra rehabilitarse del todo.
Aunque trata de evitar comparaciones con el trágico caso de la británica Amy Winehourse, Michael no descarta que Lindsay pueda sufrir una sobredosis en cualquier momento.
“No me gusta poner de ejemplo a Amy Winehouse, pero tenía mucho talento y tampoco hacía caso, y murió por culpa de las drogas. No quiero que le pase eso a mi hija. En junio cumplirá 27 años”, explicó a la revista more! el asustado padre, refiriéndose a la prematura muerte de la diva del soul a los 27 años de edad.
“¿Cuántos artistas han muerto por una sobredosis a esa edad? Es un miedo que no puedo sacarme de la cabeza. Estoy siempre cerca del teléfono esperando la fatal llamada”, agregó el padre de la atormentada actriz.
A menudo, Michael se culpa a sí mismo por la errática conducta de su hija, y no duda en afirmar que los problemas de Lindsay comenzaron a raíz de su divorcio de Dina, la madre de la actriz, en 2007. Ese mismo año, la intérprete fue detenida dos veces y acudió en tres ocasiones a programas de desintoxicación.
“Todo le empezó a ir mal cuando me divorcié de Dina, por eso me siento culpable. A veces miro las fotos de cuando Lindsay tenía 18 años, justo antes de divorciarme, cuando acababa de rodar ‘Chicas malas’ y todo iba bien. Las fotografías de ella que tengo de años posteriores narran una historia muy triste”, explicó.
Michael Lohan expresa además lo “roto” que se sintió al ver la fragilidad de Lindsay cuando esta se presentó ante el juez la semana pasada.
“Verla de esa forma fue algo espantoso. Estaba totalmente roto por dentro. Cuando la abracé en su habitación de hotel tras la comparecencia en los juzgados, sentí que no era la misma Lindsay a la que estaba acostumbrado a abrazar. No es del todo ella”, concluyó.