Phil Ramone, el ingeniero y productor galardonado con numerosos Grammy cuyo toque de platino incluyó grabaciones con Ray Charles, Billy Joel y Paul Simon, falleció a los 72 años.
Su hijo, Matt Ramone, confirmó el deceso. La familia no dio inmediatamente detalles de la muerte, pero Matt Ramone dijo que su padre era “muy amoroso y lo extrañaremos”.
Pocos en la industria discográfica disfrutaron de una carrera tan espectacular y diversa. Ramone ganó 14 premios Grammy competitivos y uno por toda una trayectoria. Estaba familiarizado con el rock, el jazz, el swing y el pop, y trabajó con Frank Sinatra, Aretha Franklin, Stevie Wonder, Paul McCartney, Elton John y Tony Bennett.
Produjo tres discos que ganaron el Grammy al álbum del año: “Still Crazy After All These Years” de Simon, “52nd Street” de Joel y “Genius Loves Company” de Charles.
“Siempre pensé de Phil Ramone como el tipo más talentoso en mi banda”, dijo Joel en una declaración. “El le dio forma a gran parte de mi música. He perdido a un querido amigo, y mi mayor mentor”.
Ramone fue un pionero de las grabaciones digitales que produjo la pieza que se considera el mayor éxito en disco compacto, “52nd Street” que salió en CD en 1982. También fue parte de la historia política por asesorar a administraciones presidenciales cómo grabar adecuadamente una conferencia de prensa y contribuir a organizar la famosa fiesta de 1962 para John Kennedy en el Madison Square Garden en que Marilyn Monroe le cantó el “Feliz cumpleaños”.
Produjo música para televisión, cine y teatro. Ganó un Emmy por un programa especial para televisión sobre Duke Ellington, un Grammy por la banda sonora de la obra musical “Promises, Promises” de Broadway y un Grammy por la de “Flashdance”.
Ramone perfeccionó el concepto de los “duetos” presentando a Sinatra con Bono, Luther Vandross con otros artistas más jóvenes, Bennett con McCartney y Barbra Streisand, y Charles con Bonnie Raitt y Van Morrison.
En sus memorias “Making Records” dijo haber persuadido a Sinatra que volviese a grabar algunos de sus mayores éxitos cuando el cantante no estaba convencido.
“Le recordé a Frank que aunque Laurence Olivier había interpretado a Shakespeare de veinteañero, las interpretaciones que hizo de sexagenario le dieron nuevo significado”, escribió Ramone. “Le hablé con convicción. ‘¿Acaso mis hijos, y tus nietos, no merecen oír cómo interpretas ahora tus canciones clásicas”’?
El nativo de Sudáfrica pareció destinado a crear música. Aprendió a tocar el violín a los 3 años y estudió en The Juilliard School en Nueva York. Antes de los 20 años había abierto su estudio de grabación, A&R Recording, donde se desempeñó como ingeniero para artistas como Count Basie y Sarah Vaughan. Conocía a Quincy Jones desde que era adolescente y de veinteañero se hizo íntimo de Streisand. A fines de los años 60 había trabajado en las bandas sonoras de “Midnight Cowboy” y otras películas.
“El productor de grabaciones es el equivalente en música a un director de cine”, escribió en sus memorias. “Pero al contrario que el director (que está visible, y a veces es una celebridad de por sí), el productor musical brilla en el anonimato. Desempeñamos nuestro arte a puertas cerradas”.