Dieciocho meses después de su sentencia por homicidio involuntario, el ex médico de Michael Jackson presentó una apelación argumentando que hubo errores durante su juicio.
La abogada del doctor Conrad Murray argumentó en la apelación de 230 páginas que no había pruebas suficientes de que Jackson hubiera muerto por una sobredosis del anestésico propofol que le administraba Murray.
La apelación también reitera el argumento de la defensa de que Jackson podría haberse administrado el sedante a sí mismo.
El astro pop murió el 25 de junio de 2009, días antes de que partiera a Inglaterra para su serie de conciertos “This is It”. Según testigos, Murray le había dado el propofol como un auxiliar para el sueño, pero la sustancia no está diseñada para ese propósito.
La abogada Valerie Wass dijo que el juez del caso usó al médico para dar un ejemplo debido a la fama de Jackson, y lo sentenció a la máxima pena por homicidio involuntario. La abogada dio a entender que incluso si no retiran su pena, su sentencia a cuatro años en prisión debería ser reducida.
Murray podría quedar libre en octubre tras cumplir con la mitad de su pena.
El juicio de dos meses del médico en 2011 fue muy seguido en los medios y Wass argumentó que el juez no debió permitir que las cámaras de televisión entraran a la corte, y en cambio debió mantener aislado a los integrantes del jurado para evitar que estuvieran en contacto con lo que se publicaba del caso.
La apelación también pone en entredicho la teoría de la fiscalía de que Jackson estaba entubado a una bolsa para administrar sustancias de forma intravenosa cuando Murray lo dejó solo en su habitación.
La oficina del fiscal general, que representa a la fiscalía, tiene 30 días para responder a la apelación. Wass tendrá otros 20 días para su réplica.
La abogada dijo que el resultado de la apelación podría tener un impacto en los procesos de los consejos médicos de Texas y California que deben decidir si le retiran la licencia a Murray en ambos estados.
Mientras tanto Murray fue citado a testificar en una demanda civil presentada contra AEG por la madre de Jackson, Katherine. La madre admite que la promotora de conciertos fue negligente al contratar a Murray para que cuidara del cantante.
Médico de Jackson presenta apelación
Conrad Murray, quien fuera médico de Michael Jackson, argumenta que hubo errores en su juicio.