Lo primero que haría cualquier famoso al dar cuenta de que su auto no se mueve ni para atrás, ni para adelante, sería llamar a su seguro o a la grúa para que los remolquen, sin embargo, el hombre lobo de “Crepúsculo” demostró que no es necesaria tanta parafernalia y que él es capaz de atender un desperfecto mecánico de su coche.
Taylor Lautner salía de una reunión en el L’Ermitage Hotel en Beverly Hills, cuando de repente su vehículo se detuvo, por lo que abrió el cofre y no le importó ensuciarse las manos para reparar el desajuste.
También una persona del valet parking del hotel se acercó a ayudarlo y en minutos lograron reparar la falla. Esto demuestra que mientras muchos famosos temen “romperse una uña”, otros prefieren enfrentar la realidad.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *