David Filio ¡Canta entre amigos!

David Filio se rodeó de amigos y conocidos, eran poco más de 50 los que cantaron entre tenues luces más de 20 años de historia del compositor quien convirtió una de las salas del café-bar Pórtico en un lugar de confesiones.
El fundador de MexiCanto llegó acompañado de su guitarra y dos músicos: Tatto y David Revilla a las 10:30 de la noche del sábado; Mariel Vivanco y Revi arrancaron el set que continuó poco más de media hora.
A las 10:50 el músico tomó posición al centro del lugar y sus fans lo esperaban con algunos vinos, coctelería y el ansia de cantar las viejas conocidas.
La primera: “Soy el mismo” y el artista con sus gafas sonrió ante los primeros aplausos, el eco de la música se escuchó entre el pasillo del lugar.
Llegarían “Andrómeda”, “Verte Venir”, “Coincidir”, sin duda las más cantadas.
David llegó a León para recordar sus dos producciones: “El Agua de tu cuerpo” y “Tal cual”, el set estuvo conformado de ambas producciones, además de éxitos de Mexicanto.
“Tu pinta”, enamoró a las parejas, algunas abrazadas y otras afuera discutiendo su futuro entre el sonido de la guitarra.
“Claro que”, “El Agua de tu cuerpo”, “Te vi llegar”, fueron las que más frases arrancaron: ¡No te vayas David!, ¡Otra, otra, otra!. El cantante sólo se dejó llevar y agradeció a su público la emoción y el recibimiento.
Las sorpresas de la noche fue el canto de dos inéditas: “Te irá bien” (dedicada a una de sus hijas que se fue) y “Volver a ti”, un homenaje a su esposa, por el recuerdo de una vida juntos como pareja.
David se sintió entre amigos, él mismo lo dijo, después de casi 3 horas de interpretación llegó el momento de dejar esa pequeña sala y volver a casa, no sin antes compartir con aquellos quienes lo acompañaron por la noche y lo despidieron por la madrugada.
Unos minutos antes de las 2 de la mañana el ambiente se pacificó, las guitarras callaron y el público aplaudió a David, quien cantó con el sentimiento de una primera vez.
La historia de David Filio (desde 1979) quedó resumida en algunos minutos, unos de los más románticos para las parejas, para un público maduro que le aplaudió como a los amigos: con sinceridad.