No era uno, ni dos, sino cuatro cuerpos los que sorprendieron al público guanajuatense con un desnudo total en el Teatro Manuel Doblado.
La escena ‘XXXX’ no duró más de diez minutos y en cambio provocó que más de uno abriera bien los ojos y dijera desde su asiento: ¡Sí se desnudan! o ¡tapa tus ojos!.
La obra de Mauricio Pichardo, dirigida por Claudia Ríos y protagonizada por Mauricio Ochmann, Claudia Lizaldi, Pablo Lyle y Fernanda Vizzuet, provocó curiosidad entre las más de dos mil personas que acudieron en dos funciones al Teatro el pasado martes por la noche.
Los asistentes no sólo vieron cuerpos atléticos en topless, sino el trama atemporal que retrata la controversial vida de dos parejas jóvenes, que están en el mismo escenario, pero sólo entre parejas interactúan, nunca hay acción entre los cuatro.
Pablo (Ochmann): un publicista atrapado en la rutina que un día se desprende de ella para pelear por su sueño de vivir de la pintura; Celina (Vizzuet): una modelo que busca seducir al destino para asegurar su futuro con su belleza.
Roberto (Lyle), un joven inmaduro que trafica drogas, la pasa de juerga y se despreocupa de los compromisos; Diana (Lizaldi), la madura, la que pide prestado a su mamá para pagar por compañía y tejer por las noches para exponer su arte como escultora.
Divertida, sin ser insulsa, por más de una hora ‘XXXX’ provocó la risa entre quienes gozaron la función, que a las 7 de la noche inició con el elenco en un departamento, que fue el centro de toda la puesta.
El equipo de producción estuvo atento a que ninguna persona utilizara cámaras, celulares o cualquier dispositivo que registrara los desnudos de los actores. La escena no dura mucho y fue la que más impactó durante la obra.
Los clichés aparecieron: “¡No me beses en la boca!, porque me enamoro”; “Dime lo que ningún otro hombre me ha dicho antes”; “Tú naciste para revolcar la cama y no para tenderla”; “Todas las mujeres tienen a una put.. en su interior”; “Deja de ser un niño y madura”; “¿Te casarías conmigo, tendrías un bebé conmigo”.
Tras un desenlace que se veía venir, un intermedio tras del que muchos regresaron, la obra provocó que más de uno se quedara atento. La actuación de los cuatro fue celebrada, pero aún más aún la irreverencia de Roberto.
Ninguna persona abandonó el teatro, todos se mantuvieron a la expectativa, pero no hubo un desnudo más.
El final llegó y tras el aplauso del público la sala se encendió con una moraleja en la que dos destinos se entrelazan.

DE VIVA VOZ

“Me pareció una obra con un tema interesante, que abarca los problemas de un sin fin de parejas y refleja la vida diaria de personas que aspiran no sólo al desarrollo social sino también al personal. Excelente conjunción de actores, que profesionalmente mostraron (literal) su talento al público y una producción que cuidó hasta el más mínimo detalle. Siento que el desnudo ‘estuvo de más’”.
Omar Rodríguez,
Comunicólogo
24 años

“Me pareció una obra divertida, que habla de la falta de compromiso que existe para formar y mantener una relación amorosa y que cae en una relación enfermiza. El desnudo sí me sorprendió porque había visto otra donde salió Otto Sirgo y aunque hubo un desnudo en esta caso sorprende porque ¡son los cuatro!”
Carlos Ayala
Publicista
35 años

“La obra fue graciosa; la mayoría iba para ver los desnudos, deleitarse un poco y siento fue más la expectativa que se formó por parte de las mujeres que de los hombres, que hasta había cierto punto tenían más morbo. Estuvo muy buena, graciosa”
Enrique Herrera
Director Artístico Ultra Fm

“Yo pienso que se fue más por la etiqueta de ver desnudos, por el morbo. Hay otros clásicos teatrales que pueden dejarnos más como seres humanos y no vamos porque nos dejamos guiar por la etiquetas”
Zayde Ruiz
Productora de Radio.
25 años

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