De sus 50 años de vida, Jason Newsted le dedicó 15 a Metallica sin tregua alguna, en cuerpo y alma.
Fue adorado por multitudes, a pesar de tener que ocupar el lugar del fallecido Cliff Burton. Vivió épocas doradas, frenéticas y memorables, pero un día decidió decir adiós, y hoy no hay indicios de arrepentimiento en su renuncia, la cual se cristalizó en 2001.
“Me siento victorioso. Me enorgullece lo que hice en Metallica; cuando estuve ahí fuimos la banda más grande, a un nivel que ninguna otra ha alcanzado…
“Pero ahora mi nuevo proyecto ha sido aceptado, pocos se oponen y, en todo caso, lo hacen porque quieren al Jason de Metallica, es ‘su Metallica’, pero eso está en el pasado. Metallica es fuerte, al igual que mi nuevo grupo, así que todos felices”, externa Jason, en exclusiva.
El oriundo de Michigan se retiró de la música durante la última década, pero está de regreso con una agrupación propia, llamada simplemente Newsted y cuyo primer disco, “Heavy Metal Music”, ya está en el mercado y alcanzó el puesto 40 de los más vendidos según Billboard.
“No echo de menos el sacrificio que demandaba estar en Metallica, realmente no los extraño (a los colegas). Me enorgullece lo que hacen, pero no los sigo tan de cerca. Aún somos compañeros de negocio, los veo de vez en cuando y somos buenos amigos, pero estoy ocupado en lo mío. No los extraño, no, soy feliz con lo que estoy haciendo.
“Me siento realizado y con la confianza que deposita en mí esta nueva banda, algo que no puedo decir que sucedía en Metallica. Me siento amado y apreciado en Newsted, así que estoy feliz así, gracias”, dice tajante, entre risas.
Hace unos días Jason sorprendió al ser parte de un show de Megadeth para interpretar un cover de “Phantom Lord”, original de Metallica.
“Tocaré con quien sea cuando sea. Si los chicos de Metallica me llaman para tocar lo haré, pero igualmente si me contacta Megadeth. Estoy abierto a muchas bandas, casi nunca me niego para algo así, y si esos chicos desean que toque con ellos, adelante”.
“Heavy Metal Music” fue grabado en un garaje, hecho que el bajista atesora especialmente por recordarle una época en la cual ya casi nadie pasa por un proceso tan orgánico.
“Grabar en el garaje es más honesto y genuino, no hay trampas, es música directa y real. (…) Fue difícil ponerle mi nombre a una banda porque es mucha responsabilidad y nunca fue planeado. Me mantenía felizmente retirado, pero hace meses hicimos un par de canciones, a la gente le gustaron y de ahí despegamos. Empecé a escribir canciones por primera vez en mi vida como parte de un álbum”, revela.

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