La entrada del auditorio Juan Rulfo de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara comenzó a abarrotaste desde las 7 de la noche. Hora y media después, una oleada de aplausos, algunos chiflidos y gritos se empezaron a escuchar entre el público que ya impaciente pedía ver a Diego Luna en el escenario, dando voz a los cuentos del escritor israelí Etgar Keret.
Con casi una hora de retraso inició la velada, que estaba programada a las 20:00 horas y que se anunciaba como “atractiva e impredecible”.
Pero antes de todo, Marisol Shulz, directora de la FIL, pidió al público un minuto de silencio para honrar la memoria de Nelson Mandela, quien falleció ayer a los 95 años.
Después de una larga espera, el público volvió a aplaudir, ya no para exigir la entrada al auditorio, sino por la llegada de Etgar Keret, quien esta vez fue un espectador más y se sentó entre los asistentes, acompañado de su esposa y su hijo.
Los aplausos se incrementaron nuevamente cuando Diego Luna apareció en el escenario.
Al inicio de la velada, titulada “Una noche con Luna”, se proyectó un video donde Etgar Keret contó con humor algunas anécdotas de su vida, como el momento en que se dio cuenta de que quería ser escritor.
En seguida, Diego Luna procedió a la lectura de cinco cuentos del autor isrelí, mientras en una pantalla se proyectaban algunas imágenes que aludían a las obras de Keret.
La velada, en la que no se permitió tomar imágenes fotográficas y video para la prensa, estuvo organizada por el Estado de Israel, invitado de honor en la FIL, y por la Editorial Sexto Piso.

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