Cuatro cintas mexicanas, el documental de Mercedes Sosa y el filme de Joaquín Sabina y Joan Manuel Serrat son las cartas fuertes de la edición 35 del Festival de Cine de La Habana, que arrancó este viernes por la noche con una gala en el capitalino Teatro Karl Marx.
Uno de los momentos más esperados es el estreno mundial de Mercedes Sosa, la Voz de Latinoamérica, del argentino Rodrigo Hernán Vila.
Y también Serrat y Sabina: el Símbolo y el Cuate, sobre la gira de ambos cantautores por América Latina; la cinta Bolívar, el Hombre de las Dificultades, del venezolano Alberto Lamata; y La Historia no Contada de los Estados Unidos, una serie de 12 capítulos de Oliver Stone.
Desde el pasado miércoles y hasta el próximo 15 de diciembre se respira puro cine latinoamericano ante las varias proyecciones programadas.
Los países que presentan más largos de ficción son México y Argentina, con cuatro películas cada uno; Chile, con tres; Cuba, Brasil y Venezuela con dos; y Bolivia, Ecuador, Uruguay y Perú con una.
Se tiene previsto que en la ceremonia de apertura participe la compañía de Danza Contemporánea y se proyecte el filme Gloria, obra de 2013 del director chileno Sebastián Lelio, aspirante al Coral en la categoría de Mejor Largometraje de Ficción.
Éste es el primer año que el Festival arranca sin su fundador y principal promotor del evento, Alfredo Guevara, fallecido en abril a los 87 años de edad.
“Es innegable la influencia y la impronta que nos ha dejado Alfredo Guevara”, señaló a los periodistas, Iván Giroud, nuevo director general de la cita, quien destacó el desafío que supone para un país pequeño como es Cuba mantener alto el nivel del festival, más aún en el mundo de hoy.
El experto consideró conveniente reflexionar sobre el nuevo cine latinoamericano y cómo entronca hoy en lo político y en lo estético, con la tradición que le dio su nombre al nacer el Festival en 1979.
No obstante, Giroud opinó que esta edición no será una mirada nostálgica hacia el pasado.
Más de 30 naciones y 400 títulos de los que 300 son de factura latinoamericana podrán ver los cinéfilos isleños y extranjeros que abarrotaron las 15 salas capitalinas.
Además, este año el cine cubano celebra el 20 aniversario del filme de Titón Gutiérrez Alea, Fresa y Chocolate, que fue nominado al Óscar a la mejor película extranjera por la Academia estadounidense.

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