Serrat & Sabina es un título que difícilmente se verá de nuevo en las marquesinas, aseguró el cantautor Joan Manuel Serrat.
El posible fin de la colaboración no se debe a ninguna pelea o diferencia creativa, sino a un distanciamiento en los intereses de ambos compositores españoles, agregó el catalán, de 70 años, quien seguirá como amigo del andaluz todo el tiempo que la vida se lo permita.
“Es muy difícil que volvamos a emprender una experiencia como la que hicimos, porque cada uno tiene sus proyectos. Lo que hicimos, lo hicimos muy a conciencia. Tuvimos la suerte de que nos salió muy bien, que nos integramos bien y la gente se integró bien.
“Hay un refrán que dice ‘nunca digas de esta agua no beberé’, pero se me hace que será muy difícil volver a tener una experiencia juntos”, compartió, en entrevista.
La unión de los artistas generó giras internacionales como Dos Pájaros de un Tiro y discos como La Orquesta del Titanic.
El llamado “Niño de Poble Sec” está en México para presentarse cinco noches en el Palacio de Bellas Artes, recinto que pisó por primera vez en 1969, y después vendrá a León, recordando así su última presentación en el Bajío, durante el 36 Festival Internacional Cervantino (2008).
Al País, con el que se dice estar muy agradecido, lo ve actualmente mejor en temas como la pluralidad política y la politización de los ciudadanos.
En el lado negativo de la balanza para México, señaló, está el tema de la seguridad, donde se insertan Michoacán y sus autodefensas.
“Me preocupa que el ciudadano, que debiera tener fuerzas públicas que lo protegieran, una policía, un ejército, un gobierno defendiéndolo, necesite armarse para defenderse.
“No creo que en un Estado que progresa sea el propio ciudadano el que tenga que establecer las leyes. Uno sabe cómo empiezan estas cosas, pero no sabe bien cómo terminan”.
A Serrat, quien asegura no tenerle ningún reproche a la vida en cuestiones de salud, no le causa repulsión hablar de temas políticos, pues, a su parecer, todas las personas nacen políticas.
Estandarte cultural de Cataluña, el poeta se siente preocupado por el nivel del debate en España sobre la independencia de la comunidad autónoma.
“Son procesos largos, complicados y muy viscerales. Son procesos en los que las vísceras pesan, quizás, más que la razón”, opinó.
“Es conveniente que las razones comiencen a tener el peso para legitimar o deslegitimar esta posibilidad (la independencia), mostrar qué consecuencias le traería un proceso de este tipo a unos y a otros”.
DOS GRANDES EN LEÓN
Después de haber colaborado juntos, el primero en presentarse en solitario en la ciudad, fue Joaquín Sabina en noviembre del año pasado. El Domo de la Feria recibió al andaluz con los brazos abiertos, y éste agradeció regalando su música, su poesía y su encanto.
Ahora será el turno de Joan Manuel Serrat, el próximo 20 de febrero ofrecerá una única función en el Teatro Manuel Doblado.
Aunque nunca vinieron juntos, en el imaginario sus seguidores uniran a estas grandes figuras de la música contemporánea.