Son ricos, famosos, tienen una hija y este verano se casarán pero antes de darse el “sí acepto”, Kim Kardashian y Kanye West tienen que firmar un acuerdo prenupcial.
En dicho documento se especificarán los detalles en caso de un divorcio, donde la hermana más famosa del clan Kardashian podría verse afectada.
De acuerdo con Hollywood Life, el rapero ha especificado que por cada año de matrimonio la socialité recibirá un millón de dólares pero tendrá un tope de 10 millones, esto quiere decir que si los padres de North West se divorcian después de 11 años o más, Kim sólo podrá acceder a esa cantidad.
Aunque a simple vista puede ser mucho dinero, en realidad es nada para Kanye pues su fortuna está valuada en 100 millones de billetes verdes y esta cantidad sigue creciendo. Kim, por su parte, tiene 40 millones de dólares.
En cuanto a su casa de Bel Air, la empresaria de 33 años podrá quedársela así como todos los regalos que le ha hecho el rapero, los cuales hay que resaltar, no son nada baratos.
Además de regalos, dinero y propiedades, West ha incluido una póliza para su prometida de 20 millones de dólares en caso de que le suceda algo al rapero.
Un punto que no se ha especificado son los hijos y la manutención que Kanye en caso de un divorcio, les daría si tuvieran un bebé además de North West.
De acuerdo con una abogada experta en el tema consultada por Hollywood Life, el prenupcial del intérprete de “Coming Home” es muy injusto para Kim pues con la limitante de 10 años, no existe espacio para negociar más dinero.

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