“Si tú eres talla grande, entonces yo soy obesa”, escribió una fanática a la modelo Robyn Lawley, quien a sus 25 años decidió subir a las redes sociales una imagen sin retoque, donde posa con traje de baño.
Exitosa en el mundo de la moda, Robyn ha ganado miradas por ser la primera mujer “con mayores dimensiones” en aparecer en portadas de revistas que sólo permiten figuras “perfectas”. El escándalo no está en si la chica merece o no ser imagen de las publicaciones, sino en lo que se denomina fuera de los cánones.
Las medidas de esta modelo son 100-81-111, que comparadas con el 90-60-90 parecen un gran salto, aunque en la vida real es el promedio de las mujeres comunes, al grado en que, si no fuera porque la industria la vende como “talla grande”, nadie notaría que es robusta.
Si bien consigue trabajo e incluso ha sido protagonista de campañas para firmas como Ralph Lauren, Robyn no se ve a sí misma como una modelo común, y sus seguidores opinan: “El hecho de que ella sea una modelo de talla grande me enferma. Es hermosa y esbelta”, incluso le reclaman: “No eres de talla grande. Eres una persona talla normal. Ni más, ni menos. Es un insulto a la gente que de verdad tiene problemas de peso que te catalogues así”.
El primer acercamiento de la modelo a las agencias fue a los 15 años. En ese tiempo no se sentía preparada y volvió al tener 18. Como no cumplía con las medidas, aceptó firmar en el rubro de “talla grande”, a partir de entonces ha encontrado mayor oportunidad laboral.

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