Aparentemente casarse con George Clooney tiene sus ventajas. La recién esposa del actor, Amal, se ha posicionado en los primeros sitios del London Evening Standar, ranking en el que se enlistan los 20 más poderosos de la capital británica.
Amal ocupa el cuarto lugar, después de George Osborne (político del Partido Conservador y miembro del Parlamento), Boris Johnson (político y periodista), y Demis Hassabis (fundador de las teconologías Deep Mind), haciendo de lado a renombradas personalidades como Victoria Beckham, Malala Youzafzai (recién ganadora del Premio Nobel de la Paz) y Kate Bush.
La señora Clooney junto con Victoria y Theresa May, son las únicas tres mujeres en el listado de los primeros diez.
Aunque han pasado tres semanas desde su boda, la también abogada reinició sus actividades para defender las Estatuas del Partenón, en ocasiones nombradas “Elgin Marbles”, esculturas griegas ubicadas temporalmene en el museo británico de Londres, y que de acuerdo al Evening Standar, Clooney se ha esforzado durante mucho tiempo en ayudar a Grecia a recuperar dichas antiguedades.
Ícono fashionista
Amal se ha convertido en una de las mujeres más fotografiadas después de su boda con el “incasable” actor.
“Era una abogada de buen nivel que se vestía con trajes sastre en tonos oscuros, zapatos altos y portafolios, muy propia y muy en su papel. Pero durante la celebración de su boda, se vio que está muy bien asesorada ya que lució diseños de Alta Costura que acaban de desfilar o que se han convertido en piezas clásicas”, afirmó el coordinador de moda Trino Portillo, encargado del vestuario del programa “Desafío Fashionista”.
La directora creativa Annie Lask, editora de publicaciones de moda, alabó su figura.
“Es alta, delgada y con piernas largas, así que puede lucir sin problemas cualquier vestido. Se esforzó también en el maquillaje, natural pero elegante, así como su melena que lució sensacional”.
Algunas de las claves de su estilo, según expertos en moda, son: uso de vestidos drapeados con cortes asimétricos; tacones altos, lentes oscuros y grandes; aretes y brazaletes discretos; motivos gráficos llamativos como las rayas y las flores.