“Dama de Negro” ¡pondrá a temblar!

“La Dama de Negro” se niega a descansar en paz… al menos en León. Su maldición continuará vigente mientras el público abarrote las dos funciones de hoy en el Teatro Manuel Doblado.
En entrevista telefónica desde Zacatecas, el principal artífice de este escenario de terror, Rafael Perrín, compartió con AM su sentir sobre una de las puestas más esperadas en Guanajuato.
“Es cuando recomiendas algo bueno porque te gusta y ‘La Dama de Negro’ se ha transformado en una gran excusa para ir con los amigos”, consideró.
Perrín es un experimentado de la escena con más de 30 obras teatrales en su haber, entre las que destacan: “Sálvese quien pueda”, con Eugenio Derbez, con la que obtuvo el premio a mejor director de comedia; “Loco por ti” y “Yo odio a Hamlet”, entre muchas otras.
Él sabe lo que hace y por eso provoca que la obra sea  casi adictiva. Muchos conocen el momento exacto en que ‘La Dama de Negro’ aparecerá entre sus narices; cuando el grito desesperado de la mujer clame por justicia y cuando el crujir de los muebles erizará cada pelo del cuerpo.
“La gente que ya la vio y lleva a otros a verla se vuelven cómplices nuestros, eso es muy divertido porque se quedó como una especie de cofradía entre el público para tomarlo a broma o jugarles un gusto”.
Si bien “La Dama de Negro” hace su parada en León a principios del mes de noviembre, todo el año se va de gira por el resto de la República.
“Todo el año no paramos. Nos tomamos vacaciones del 8 al 24 de diciembre, pero fuera de esas dos semanas, damos funciones de viernes a domingo, vamos por todos lados”.
“La Dama de Negro” es la historia de Arthur Kipps (Odiseo Bichir); un personaje que ha vivido aterrado a partir de una experiencia fantasmal que enfrentó en su juventud y quien busca contarla a su familia, para ello busca al director de escena John Morris (Perrín), quien al igual que él, queda pasmado por los sucesos que acontecen.
Imagine la escena: un baúl y las sombras ambarinas de un personaje que se esconde entre el telón de un viejo teatro, la escena parece sencilla pero es el inicio del viaje por el terror psicológico, comandando por un equipo que ya son familia.
“Es como la familia de cirqueros, pero acá somos de actores, todos nos llevamos muy bien y por fortuna ha sido con todos los actores que se integran a la obra, vivimos en una especie de cofradía, somos muy afortunados”.
“La Dama de Negro” parece ser atemporal, aún no hay una fecha para que su espíritu deje de deambular en teatros de México.
“¡Ojalá que sí ya descanse!, no sabemos, igual y ella acaba con nosotros, otra cosa que sé que a lo mejor nuestros nietos van a dar las funciones o cuando venga un diluvio o cuando los gobernantes se vuelvan personas respetables, no sabemos qué va a pasar, pero no veo cercano el día que la gente ya no quiera ver este cuento de miedo, tal vez será su fin”.
Durante dos décadas, el público fanático que fue un niño ahora es adulto y replica con gusto la terrorífica experiencia.
“Algunos ya casados nos dicen que fue la primera obra que vieron, eso es muy grato porque estamos en una nueva generación. Esta obra me ha dejado mucha satisfacción y responsabilidad, cada función la damos como la última, cada vez que llegamos al teatro llegamos tres horas antes, en ningún momento decimos ‘es una más’”, consideró.
Pero, el miedo no lo provoca ‘La Dama’ ni sus túnicas negras, sino la respuesta que puede tener el público o las muestras espontáneas de su espanto.
“En Guadalajara una mujer gritó aterrorizada, en una parte en donde no había nada. No sabemos si el de junto le jugó una broma, el hecho es que este tipo de cosas suceden muy seguido. La gente llega con la idea de que los van a asustar(…)”, finalizó.