Por más de una hora todos quedaron maravillados por su potente voz. El tenor Fernando de la Mora provocó que las gargantas, pies y brazos se movieran al son de las canciones mexicanas en la Plaza Principal de León.
“Fernando es un tenor que siempre anda de viaje por Alemania, Europa, en los lugares más importantes del mundo y tenerlo aquí es una muy buena oportunidad”, dijo José Chávez, miembro del Mariachi Sol Universal, quien acudió al Centro Histórico para aprender de las lecciones y cantos del artista.
Fernando de la Mora una vez dijo: “Si se quiere salir de la barbarie es necesario impulsar la cultura y el arte”; bajo ese lema, el también filántropo compartió con el público leonés un recorrido por su ‘México Lindo y Querido’, excusa perfecta con la que reafirmó su amor por el país.
Con motivo de la inauguración de la ‘ruta turística’ del Centro Histórico, es que el famoso compartió con más de seis mil leoneses canciones que fueron parte de su última gira “México Lindo y Querido”, espectáculo que presentó en los escenarios más importantes de México y el mundo.
Después de las 8 de la noche, el mariachi Gama Mil se instaló en el escenario para dar pie al artista, quien ataviado en el clásico traje de charro saludó amablemente e invitó al viaje por la identidad.
“Serenata Huasteca” y su adorado Pedro Infante fueron parte del repertorio que esa noche llevó a jóvenes y adultos a cantar las típicas canciones del pueblo.
“Ahora vamos a cantar una canción que a mi gusto es de los mejores artistas de México, de Latinoamérica… San Pedro Infante”.
“100 años” fue una de las más cantadas y grabadas en los celulares, al igual que “Cruz de olvido” y “Paloma Negra”.
A pesar de una falla en el sonido, que provocó que por algunos minutos los artistas entonaran ‘a cappella’, el público aplaudió y apoyó con su canto.
“Si nos dejan” fue el estandarte del versátil tenor que igual canta sones, huapangos, como danzones y música clásica.
Fernando lanzó un mensaje a todos los mexicanos: “Señores, si ustedes me permiten expresar mi opinión sobre mi México lindo, quiero decir que va a cambiar cuando nosotros cambiemos para bien, cuando cada uno de nosotros cambie, esto no se va a lograr con planes mágicos, todos tenemos que hacer lo que nos toca, ¡con honor!”.
Enseguida llegó “Que bonita es mi tierra” de Miguel Aceves Mejía, sin duda, una de sus favoritas porque le recuerda su niñez, aquella que estuvo impregnada de los cantos de su madre.
El momento veracruzano llegó con un popurrí que incluyó “El Cascabel” y “Veracruz I”, además del huapango y los sones jarochos.
Para Fernando no había mejor momento que las 9 de la noche para entonar “Ella”.
“¡A ver, ahí les va otra de San Pedro Infante!, pero me tienen que ayudar a cantarla, todos se la saben, es el famoso silbidito”.
“Amorcito corazón” llevó a los asistentes a soltar su mejor silbido y hasta suspiro, no faltó el que se armó de valor para pedirle a una mujer su número de teléfono con “No volveré”.
Enseguida hizo atrevida proposición: “Señores, con su permiso, quiero dedicarle una canción a todas las señoras, es una canción muy atrevida” y entonces cantó, “Vieras cuántas ganas tengo”.
“Mi gusto es” y un recorrido por los himnos de los estados mexicanos era el sello de la noche, pero el público amenazó con gritar hasta el cansancio si no cantaba “Caminos de Guanajuato”.
“Esperen, no se me impacienten, lo que sigue son canciones que se han quedado en el corazón de todos, empezamos con la Ciudad de México”.
Guadalajara, Aguascalientes, Chihuahua, Sonora, Coahuila, Veracruz, San Luis Potosí, Puebla, Monterrey, Sinaloa y Guanajuato, fueron recordadas.
El público pidió más, él volvió con “El Rey” para finalizar su presentación poco antes de las 10 de la noche.
Fernando de la Mora pide cambiar por México
Con su gira “México Lindo y Querido”, Fernando de la Mora
razonó junto a leoneses, sobre el cambio que el país necesita