El cineasta mexicano, Gabriel Ripstein, obtuvo el galardón a Mejor Ópera Prima en el Festival Internacional de Cine de Berlín con su cinta “600 Millas”.
El premio consiste en 50 mil euros, otorgados por la Sociedad Alemana para la Observación de los Derechos de Cine y Televisión, para los que aún no tiene planes.
“Se lo dedico a mi hijo Matías, es mi amor. Creo que con él tendremos la cuarta generación de cineastas, ya lo lleva en los genes. Tiene grandes aptitudes a su corta edad”, dijo Ripstein en entrevista.
Tan importante es su familia en su vida, que en una de las primeras personas en las que pensó después de saber que se había ganado un premio, fue con su papá, Arturo Ripstein.
“Le mandé decir con (el productor) Michel Franco que nos comunicaríamos después de tomarnos varios tragos”, bromeó.
El filme trae a la pantalla grande el tema del tráfico de armas de Estados Unidos a México, aunque Ripstein aclara que no pretendía señalar a buenos y malos en el tema del tráfico de armas, sino contar los hechos.
“Tuve que dejar mis sentimientos de lado para mostrar esta realidad preocupante lo más objetivamente posible”, dijo el cineasta.
El mexicano asegura que tiene el firme propósito de seguir contando “historias oscuras de la vida”, pues lo lleva en su naturaleza.
“Eso me preocupa, y lo digo como contador de historias que soy, no como el cineasta político que se quiere ver en mí”, indicó.
El filme nace después de que Ripstein escucha del fallido operativo Rápido y Furioso, un programa con el que se buscaba rastrear el camino de las armas a México.
“600 Millas” tendrá su premiere en México en el Festival de Cine de Guadalajara en marzo próximo, y el estreno comercial está pensado para la segunda mitad de este año.
El cineasta mexicano no fue el único galardonado de América Latina, pues en esta 65 edición de la Berlinale, el continente destacó con otras cintas como las chilenas “El Club” y “El Botón de Nácar”, y la guatemalteca “Ixcanul”, que se llevaron osos de plata.
En competencia también estuvo la coproducción mexicana “Eisenstein en Guanajuato”, de Peter Greenaway que, aunque dejó buenos comentarios en la crítica, se fue sin premio alguno.
La mejor película de esta Berlinale, premiada con el Oso de Oro, fue “Taxi”, del iraní Jafar Panahi, un cineasta crítico de su régimen que por restricciones gubernamentales no puede abandonar su país.
“Este premio es sobre todo para el esfuerzo que hace Panahi por la libertad de expresión de su país”, dijo el director de la Berlinale, Dieter Kosslick.
Los otros ganadores de la Berlinale 65
– El Oso de Oro a la Mejor Cinta fue para Taxi, de Jafar Panahi (Irán).
– El Gran Premio del Jurado para El Club, de Pablo Larraín (Chile).
– El Oso de Plata Alfred Bauer fue para Ixcanul, de Jayro Bustamante (Guatemala).
– El Oso de Plata a la Mejor Dirección se lo llevaron Radu Jude por Aferim! (Rumania), y Malgorzata Szumowska, por Body (Polonia).
– El Oso de Plata al Mejor Actor y a la Mejor Actriz fue para el elenco de 45 Years de Andrew Haigh (Reino Unido), Tom Courtenay y Charlotte Rampling, respectivamente.
– En el rubro de Mejor Guión se distinguió al chileno Patricio Guzmán, por El Botón de Nácar.
– La Mejor Contribución Artística fue doble: Sturla Brandth Grøvien por su manejo de cámara en Victoria de Sebastian Schipper, así como Evgeniy Privin y Sergey Mikhalchuk por Pod Electricheskimi Oblakami (Under Electric Clouds), de Alexey German Jr.