“Florece” su sueño

Muy pocos pueden negarse al llamado del destino. Como arena en el mar, Flor Amargo antes Mayte Carballo, se dejó llevar por la pasión musical que nació desde los cuatro años de edad.
Primero fue el piano, -que aprendió a tocar a escondidas de su padre- después fue la guitarra, el acordeón y el bajo.
“Cuando era chiquita le decía a mi mamá que quería ser directora de una orquesta y ella siempre me apoyó. Mi papá en un principio no estuvo de acuerdo, hasta que me vio tocar en el Foro Sol y en el Metropólitan. Ahora sigo lo que más me gusta hacer”, platicó en entrevista con am.
Por primera vez en León, compartió escenario con el grupo Torreblanca, lo que marcó un hito en su corta, pero importante carrera como artista indepediente.
Minutos antes de su presentación en el Hammer Soul, Flor habló sobre su ‘Katartic Pop’.
“Mi propuesta es cantar emociones convertidas en música, también un poco de teatro en escena con mucha energía”, reveló.
Actualmente Flor se encuentra de gira promocional con Torreblanca, banda que ‘le presta’ a su público. 
“Nos conocemos de hace tiempo porque le escribí a (Juan Manuel) Torreblanca para ver si tocábamos juntos; se dio la oportunidad de trabajar en mi nuevo disco ‘Espejo Cristal’ que vamos a lanzar apenas, accedió y cantó y participó en el video. Se hizo una convocatoria y yo quedé dentro”, platicó.
Además, Flor participó en “La Voz…México” en su primera temporada. En 2010 lanzó su primer disco “Carrusel” bajo el cobijo de Ocesa Seitrack, para después ocuparse de su carrera con la promoción independiente de “Espejo Cristal”, en el que participan Jaime Kohem, Mon Lafferte, Tren a Marte, René Lugo, Dr. Shenka, entre otros.
Como toda buena creativa ya planea un excelente inicio para el 2016.
“Estoy en pláticas con Ximena Sariñana para que participe como productora de mi siguiente disco. Por lo pronto seguiremos con la gira hasta marzo del próximo año, y el disco a partir de ese mes, tengo muchas ganas de seguir con los duetos”, adelantó. 
Junto a sus fans, Flor regalará en los próximos días comida y productos para gente en estado vulnerable. Todo esto es producto de una travesía personal que la dejó marcada.
“Tuve una depresión muy fuerte hace tiempo y me internaron. Soy muy creyente de la Virgen de Guadalupe, y gracias a ella descubrí que mientras más ayudaba, mejor me sentía, para mí la vida se resume en dar amor y servicio a los demás, eso mismo es lo que me gusta entregar a la gente”, aseguró.
Flor espera no demorar en su próxima visita, en la que desea dar sus primeros pasos sola por el Bajío.