Son Maná sus ídolos

Nadie es profeta en su tierra y los músicos de Lyooh lo saben, por eso salieron de la comodidad de su hogar para alcanzar su sueño.
La historia de Alan Cárdenas, Diego Mendoza y Román Ortíz, comenzó en 2010 cuando obtuvieron el primer lugar en el concurso “Rockeando por la educación”, organizado por el gobierno del Distrito Federal.
Gracias a su propuesta con influencia de rock actual y clásico, Lyooh ganó en aquella ocasión.
De visita por León, la banda compartió parte de su historia.
“Después de que ganamos el concurso llegaron muchas cosas buenas, como abrir algunos conciertos de Maldita Vecindad, Salón Victoria,  alternar con Los Daniels en el Palacio de los Deportes, de ahí surgió nuesta carrera profesionalmente. Nuestra propuesta es fusionar rock pop y balada pop, escribimos las canciones y así es como el proyecto ha ido avanzando, gracias a la aceptación de la gente en las redes sociales”, comentó Román. 
A inicios del 2015 la banda lanzó su primer material homónimo con cinco temas originales, y ahora promocionan su segundo disco “Olvidarme de ti”.
Este disco es la entrada al mercado profesional, además representa lo más profundo de sus sentimientos.
“A la gente le ha gustado mucho el proyecto, se identifican con algunas canciones y eso es de lo más bonito, que la gente ha conectado, que canciones que yo escribí para mis ex, están reflejadas en el proyecto. Nos gusta muchísimo”, añadió Román.
El propósito de Lyooh es convertirse en el próximo Café Tacvba, Maná o incluso Caifanes.
“Queremos llegar lejos, queremos alcanzar a tocar a miles de corazones”.
El trabajo continuará, con el sueño de colocarse como representantes del rock mexicano.
“Lo importante es seguir trabajando. La industria ha cambiado demasiado, no sólo ha habido cambios empresariales, sino en la forma de distribuir la música, admiramos a los músicos de antes, y que continúan. Estamos trabajando para ser la siguiente banda legendaria”, añadió Alán.